La Fundación Banco de Alimentos ha tenido en sus casi veinte años de andadura en la región numerosos patronos, colaboradores y voluntarios. Vicente Pisano Villabona es uno de ellos, pero no uno más, porque este jubilado ha estado en la organización desde su puesta en marcha y se ha granjeado un reconocimiento que le hace "patrono emérito" del banco ahora que, por motivos de edad, decide hacerse a un lado para dejar paso a gente más joven.

Pisano fue homenajeado por sus compañeros el pasado viernes, minutos antes de la entrega del premio "Asturiano del mes" de LA NUEVA ESPAÑA. Juan Luis Núñez mostró la placa con su nombre que será colocada en uno de los pasillos del nuevo almacén que el Banco de Alimentos estrenó en noviembre en el polígono industrial Espíritu Santo. Se trata de un local de casi 4.000 metros cuadrados, cedido por la empresa Alimerka, que se une a otro de distribución en Gijón y al que la organización tiene en Mercasturias para hacerse cargo de los excedentes de frutas y de verduras que no se consideran aptas para la venta, pero sí para el consumo.

Las cifras hablan por sí solas de las oleadas de solidaridad que genera el Banco de Alimentos y de la respuesta de personas como Vicente Pisano. En la "Gran recogida" del pasado año tomaron parte 1.500 voluntarios, repartidos en 538 puntos de recolección instalados por toda la región, además de numerosas entidades y empresas, junto a 72 ayuntamientos asturianos.