El Sindicato de Enfermería (SATSE) ha puesto "un rotundo suspenso" a los gobiernos autonómicos que, como el de Asturias, finaliza el curso escolar sin contar en sus centros educativos con una enfermera o un enfermero que atienda las necesidades sanitarias y de adquisición de hábitos de vida saludable de sus alumnos.

Finalizado el curso escolar 2017-18 en todo el Estado, el Sindicato de Enfermería ha analizado la situación existente en las diferentes comunidades autónomas y ha vuelto a constatar "el escaso interés de las administraciones públicas autonómicas por implantar de manera generalizada la figura de la enfermera escolar", señala un comunicado difundido hoy por el SATSE. Esta reivindicación se suma a la realizada en la misma línea por el Colegio de Enfermería de Asturias.

Según el sindicato, "las supuestas dificultades presupuestarias siguen siendo el argumento esgrimido" por la mayor parte de los gobiernos regionales para no contar con un enfermero en cada centro escolar.

Entre las competencias que se les atribuyen figuran la administración de tratamientos, el control de la alimentación o la asistencia en caso de enfermedad o accidentes, así como desarrollar una labor informativa de promoción y adquisición de hábitos saludables en los niños y jóvenes.

Otras atribuciones de la enfermera escolar se centran en actuaciones de prevención y detección de problemas de salud física, psicológica y/o emocional: detección temprana de enfermedades, bullying, desórdenes alimentarios, acoso, adicciones a determinadas sustancias, alcohol, tabaco...

Un coste "irrisorio"

En su nota, el SATSE insiste en que "el coste de contar con una enfermera o un enfermero en un centro educativo es irrisorio si se compara con el gasto total que se destina en la atención y cuidados de enfermedades que pueden evitarse con una educación sanitaria y hábitos de vida saludables". En consecuencia, reclama que los gobiernos autonómicos "vuelvan de vacaciones con la clara intención de implantar de manera progresiva y generalizada la figura de la enfermera escolar a partir del próximo curso 2018-2019".

"¿Son muchos 60 euros al día para asegurar que todos los niños y niñas en edad infantil y juvenil de un centro escolar puedan ser atendidos por un profesional sanitario competente de manera inmediata si surge cualquier incidente o si algunos de ellos sufren problemas de salud crónicos, como la diabetes, el asma, las alergias o la epilepsia?", apuntan desde la organización sindical.

En esta misma línea, el SATSE asevera que contar con un enfermero en un centro educativo "favorece la tranquilidad y la seguridad de los padres que saben que sus hijos están en manos de profesionales sanitarios cualificados que pueden atenderles ante cualquier imprevisto".