Elías G. Benavides tiene en Venecia su segunda residencia. Desde 1982 pasa allí varios meses al año. A pesar del turismo, que anega la ciudad, regresa periódicamente e imparte formación a un grupo de alumnos. Próximamente podrá verse en Oviedo, en la galería Alfara, el fruto de ese magisterio, con una selección de esas obras venecianas, una del propio G. Benavides y el resto, otras dieciséis, de sus alumnos. También el año que viene, hacia el mes de diciembre, G. Benavides tiene previsto inaugurar en la sala de la Universidad de Oviedo una exposición, con obra en papel. La energía creativa de Elías G. Benavides se mantiene alta. "Tengo impaciencia por hacer, mientras la cabeza y las manos me funcionen", afirma.