El PP elegirá en breve la nueva dirección regional, tras más de un año en situación de interinidad, y resalta el papel de Teresa Mallada y de Alfredo Canteli de cara a esta nueva etapa, que arranca con "el reto" de "recuperar para Asturias el protagonismo perdido últimamente desde que gobierna el PSOE", según anunció ayer Teodoro García Egea. La fecha de esa junta directiva está pendiente de confirmación, precisamente a la espera de poder encajarla con la agenda del secretario general del PP o de algún otro destacado cargo nacional del partido, para que puedan acudir a la puesta de largo de la nueva dirección asturiana.

El "número dos" de los populares dio por hecho que en los próximos días se convocará una junta directiva regional "para elegir a un nuevo equipo directivo". El PP regional lleva sin actividad orgánica desde septiembre del año pasado, cuando la anterior presidenta, Mercedes Fernández, formalizó la dimisión a cambio de su nominación como cabeza de lista por Asturias al Senado, escaño que finalmente logró en las elecciones general de noviembre. Desde entonces, los órganos del partido en la región no han tenido reuniones pese a coincidir con un período crítico, marcado por la crisis del coronavirus. Egea señaló como "retos" para su organización en Asturias "mejorar la conectividad con el resto de España y el incremento de la actividad industrial" porque "Asturias ha perdido protagonismo desde que gobierna el PSOE y no se escucha su voz a nivel nacional".

Teodoro García Egea destacó la labor realizada en este último año por la portavoz popular en la Junta General, Teresa Mallada, y por el alcalde de Oviedo, Alfredo Canteli, principales referentes del partido en la región. El secretario general asumió que el "nuevo equipo", al frente del PP de Asturias, "tendrá en cuenta el trabajo que están desarrollando todos nuestros líderes, tanto Teresa Mallada como su excelente equipo de diputados para poner encima de la mesa las incoherencias del Gobierno asturiano". García Egea, que también hizo mención al trabajo de los representantes locales y comarcales del partid, dedicó palabras muy elogiosas al regidor ovetense. "Estamos muy contentos con el trabajo que están haciendo nuestros alcaldes en Asturias, dirigidos por el alcalde de Oviedo, Alfredo Canteli, una persona que en poco tiempo ha sabido ganarse el respeto y el cariño de aquellos que no le conocían, que pienso que eran pocas personas".

El anuncio del secretario general sentó bien en las filas del PP asturiano, donde cada vez son más las voces que reclaman "poner fin al vacío orgánico, que perjudica a la acción política" en el actual escenario de crisis. Aunque García Egea no dio más detalles acerca de ese "nuevo equipo directivo", destacados dirigentes del partido en la región sostienen que "es el momento de unir, aglutinar, coser e integrar para demostrar a la sociedad que hay capacidad de ofrecer un proyecto alternativo". Teresa Mallada optó por un silencio que tuvo como la prudencia como argumento

La decisión de Génova, calle madrileña en la que está la sede del PP nacional, de terminar con este largo período de interinidad llega justo un mes después de que el Tribunal Superior de Justicia de Asturias (TSJA) resolviera el sobreseimiento de la causa en la que era investigada tanto Teresa Mallada como el resto de la Corporación de Aller, acusados por la Fiscalía del delito de prevaricación administrativa y urbanística en la cesión de terrenos para la construcción del geriátrico de Felechosa.

Este proyecto está bajo sospecha en la Fiscalía Anticorrupción por tratarse del posible origen de la fortuna oculta que el exlider sindical y hombre fuerte del PSOE asturiano durante décadas, José Ángel Fernández Villa, trató de regularizar ante Hacienda en 2012, aprovechando la amnistía fiscal promovida por el entonces ministro Cristóbal Montoro.

Pero el asunto aún tiene recorrido jurídico pues la Fiscalía Anticorrupción ha recurrido la decisión de sobreseimiento del Tribunal Superior de Justicia de Asturias (TSJA) para toda la corporación del ayuntamiento de Aller, a la que pertenecía Teresa Mallada como portavoz del PP.