El Valle de Arán piensa endurecer las normas de cobro en rescates imprudentes

La Generalitat ya puede reclamar pagos, pero en una década solo requirió el pago de 14 servicios

Alba Casanovas

El Gobierno del Valle de Arán, una de las zonas del Pirineo catalán donde más rescates de montaña se realizan, pretende impulsar una ordenanza paralela a la que ya está en vigor por parte de la Generalitat de Cataluña, con el ánimo de cobrar a aquellos ciudadanos cuya actitud negligente haya obligado a movilizar recursos para un rescate. En realidad, la Generalitat de Cataluña ya puede reclamar el pago de los rescates que los Bomberos realizan derivados de comportamientos imprudentes. Pero desde que entró en vigor, en octubre de 2009, solo ha requerido el importe de 14 servicios, de los cuales 10 corresponden a salvamentos en la montaña. No todos han sido abonados y otros han sido recurridos: de los 44.760,57 euros que costaron, se han recuperado 8.072,40. Desde el El Gobierno catalán se recalca que se trata de una normativa de carácter disuasorio y pedagógico, sin afán recaudatorio. Pero los rescates de montaña se han disparado un 40,5% entre 2019 y 2022 y se prevé un 2023 de récord, con más de 1.300.

Ante este nuevo panorama el Gobierno del Valle de Arán, una de las zonas del Pirineo se plantea endurecer el reglamento y se ampara en que los rescates van a más y, además, en territorio aranés es donde más se efectúan de Cataluña (781 entre 2010 y 2022 del total de 9.968, según datos de los Bomberos). Y en lo costosos que resultan..

Además, se esgrime que tiene las competencias para actuar: el Gobierno catalán hizo efectivo el traspaso íntegro de la gestión de las emergencias el pasado 1 de enero, previsto en la Ley de Aran, que restablece el régimen especial de la zona. Algunos expertos temen que reclamar los pagos puede disuadir a quien esté en problemas de llamar a emergencias y complicar aún más sus situaciones.