"Las incidencias meteorológicas, las escasas capturas y la lejanía de las principales zonas de pesca han aconsejado a gran parte de la flota tomar la decisión de dar por finalizada la campaña. Las unidades que actualmente continúan con la pesquería pronto finalizarán la faena si no consiguen elevar las capturas", señalan desde la Nueva Rula de Avilés. Y es que, salvo sorpresas de última hora, todo indica que la flota asturiana pondrá punto final a la campaña del bonito esta semana, con aproximadamente el noventa por ciento de la cuota consumida: esto significa que aún hay 2.000.000 kilos disponibles.
En Avilés esta madrugada entrará un barco con 2.500 kilos. Por el momento no se sabe a ciencia cierta si será el último que descargue bonito del norte en Conde de Guadalhorce. "Todavía hay barcos en la mar, pero pueden ir a sus respectivos puertos", explicaron desde la lonja avilesina, que este año ha vivido, como las del resto del Cantábrico, una de las costeras boniteras más largas de los últimos años. Aunque no hubo "explosión" de capturas sí acompañó el precio en primeras ventas, superando los cuatro euros por kilo.
En julio de este año se subastaron en la Nueva Rula de Avilés un total de 548.758 kilos, que son 120.283 menos que en julio de 2021. No obstante, el precio medio aumentó ligeramente por eso de que a menos pescado, mejor precio. El kilo se vendió, de media, a 4,25 euros.
El pasado agosto se subastaron 481.097 kilos de bonito del norte más. Y en septiembre, según los últimos datos publicados, se rularon 220.637 kilos.
En este caso no se puede hacer comparativa con 2021, puesto que la campaña bonitera de entonces se cerró a mediados de agosto en la que fue la costera más breve de la historia, nada que ver con la actual, con el bonito cogido uno a uno y a cuentagotas. En el cómputo regional, los kilos de bonito del norte subastados entre todas las rulas del Principado el mes pasado suman 686.096 kilos.
