La plantilla de Saint-Gobain en "shock": la división Sekurit en números rojos desde 2021, asegura la compañía tras comunicar el cierre

La dirección de Saint-Gobain Sekurit, la línea de fabricación de parabrisas, ha decidido el cese de la actividad productiva en la fábrica de Avilés como consecuencia de los problemas estructurales que presenta, tanto el mercado del que depende, como las operaciones de Sekurit en este centro, "deficitarias desde 2021", señalaron desde la multinacional francesa, sin entrar a cuantificar esos números.

La dirección entiende, "tras haber evaluado todas las opciones", que es la única alternativa posible dada la falta de actividad prevista a partir de mediados de mayo. Esta medida, que afecta a 160 trabajadores de la división de vidrio para parabrisas, se circunscribe exclusivamente a Sekurit Avilés, precisaron. Tal decisión no afecta a su fábrica de Arbós (Tarragona) –la otra de la península ibérica con división Sekurit– ni a la actividad de Glass, vinculada al sector de construcción, que cuenta con aproximadamente otros 230 empleados en Avilés.

La dirección de Saint-Gobain Sekurit plantea ahora el inicio de un proceso de diálogo sin abrir el proceso formal legalmente establecido, en el que las partes puedan negociar sin estar sometidas al período de negociación fijado por la ley. De esta forma se tratará de dar margen a las conversaciones informales para no estar constreñidos a los 30 días de plazo existentes una vez se constituya la comisión de negociación.

La decisión fue comunicada en una reunión en la que participaron el director de Recursos Humanos de Sekurit, Héctor Fernández; el director de Recursos Humanos de Glass, Juan Carlos Rivas y el director de la planta avilesina, Carlos Ayuso, quienes dieron a conocer la intención del cese total de la actividad del Sekurit Avilés, lo que dejó "en shock" al personal.

El director general de Saint-Gobain Sekurit España, José Antonio Piqueras, también trasladó su deseo de que, en tanto que se desarrollan las negociaciones, la actividad en el centro continúe desarrollándose con normalidad, de modo que el proceso de diálogo se pueda desarrollar sin conflictividad y en los mejores término. En este sentido reconoció que la decisión de cerrar Sekurit en Avilés había sido muy dolorosa para él.

Fuentes de la compañía manifestaron su intención de seguir formando parte del tejido industrial de Asturias con su actividad Glass, teniendo prevista una reparación del horno para este año estimada en más de 5 millones de euros. La intención es que esas obras den comienzo antes de verano. Los cinco millones que tienen previsto destinar a ello representan el triple de la última inversión realizada.

No obstante, desde la plantilla se asiste con recelo a ese proyecto y consideran que la reparación del horno es una solución temporal y la garantía de futuro sería uno nuevo.

Desde la delegación española de Saint-Gobain manifestaron en varias ocasiones que la planta de Avilés presentaba problemas de estructura y también de flexibilidad. Y profundizaban acerca de la necesidad de adaptarse a los tiempos: que no se venden coches y, por lo tanto, tampoco se fabrican y en consecuencia, las auxiliares reducen sus ingresos (el negocio de parabrisas de Sain-Gobain no deja de ser auxiliar del automóvil). Por lo que se refiere al Glass los resultados son "un poco mejores que en Sekurit, pero tampoco los mejores posibles".

Suscríbete para seguir leyendo