Ni los peores pronósticos meteorológicos ni la intensa lluvia que los confirmó y con la que amaneció ayer Villaviciosa amedrentaron a los alrededor de 45 vecinos de Poreñu para participar en la sestaferia convocada por la Asociación La Capilla. La actividad estaba programada para la primera semana de octubre, antes de la fiesta del Pilar, pero se ha adelantado con motivo del Premio "Pueblo ejemplar" que la Fundación Princesa de Asturias les ha concedido por "mantener vivas sus tradiciones" y por haber mejorado y dinamizado la vida de todos los vecinos a través de unas asociaciones vivas y fuertes, según expresaron los propios Reyes de España.
Se dividieron en dos batallones de limpieza: en la escuela estuvo la "sestaferia de mujeres", con unas quince vecinas acondicionando el edificio que les sirve de local social, y unos treinta hombres, "más que nunca", limpiaron muros y caminos. Ellos pillaron una buena mojadura, sobre todo a primera hora de la mañana, pero así todo "no pararon", destacaron desde la escuela Loli Riva e Isabel Lanzón, presidenta y secretaria de la asociación, respectivamente.
Armados con rastrillos, tractores, desbrozadoras y útiles más domésticos como escobas, recogedores y bayetas, Poreñu se volcó ayer en una tarea que desarrollan siempre dos veces al año: a principios de octubre y en primavera. "En esta convocatoria respondieron más personas de lo habitual", destacó Lanzón, quien contó entre los que echaron una mano a "hijos de gente de Poreñu que viven en la Villa y de los que tienen casa y están fuera. Vinieron todos a trabajar". La asociación ya ha mantenido una primera "toma de contacto con la Fundación Princesa de Asturias y ha convocado para hoy una reunión con la comunidad de aguas de Poreñu y con la Asociación de fiestas de la Virgen del Pilar. "Nos reuniremos para diseñar un plan de trabajo conjunto", explicó la secretaria. Entre todos concretarán hoy lo que van a hacer y luego lo trasladarán a la fundación.
Saben que les queda "mucho trabajo de organización" por delante, pues el de limpieza en sestaferia es "el habitual", explican ciertamente sorprendidos, pues colocaron los carteles y avisaron el miércoles pasado. En la asociación están contentos, pues "la gente responde siempre, pero ahora están volcadísimos. Nos están arropando muchísimo", agradecen las responsables del colectivo vecinal.
Hasta los niños están disfrutando con el ajetreo que se vive estos días en la localidad maliayesa y hay incluso ayudantes que apenas han cumplido los doce años. Uno de los fuertes de la asociación es su Muestra Etnográfica, compuesta por unas 1.500 o 1.600 piezas y que está abierta al público todos los fines de semana del año, ya que entre los integrantes del colectivo se turnan para atender el local social.
