Reabierto el tráfico en el Corredor del Nalón en Caso, que estuvo interrumpido por la caída de una gran roca en Coballes

Los operarios, con una máquina con martillo, lograron esta mañana despedazar la piedra y reabrir los dos carriles

La máquina con martillo, partiendo la gran roca en Coballes

La máquina con martillo, partiendo la gran roca en Coballes

L. M. D.

El tráfico vuelve a circular con cierta normalidad en la parte alta del Corredor del Nalón. En la noche del jueves, sobre las 9, una gran roca, acompañada de gran cantidad de piedras más pequeñas, caía a la calzada de la AS-117 a la altura de Coballes, poco antes del cruce del puente para acceder a esta localidad y a la carretera de Caleao (si se circulaba en sentido Tarna). Ayer mismo por la noche se intentó retirar la roca, pero la maquinaria movilizada no pudo llevar a cabo esta tarea. Lo que sí consiguieron entre Protección Civil y los operarios de Carreteras fue habilitar un carril para que el tráfico no quedase completamente cortado toda la noche. No ha sido hasta esta mañana, hasta aproximadamente las once, cuando se ha podido abrir por completo la calzada.

La roca, cortando por completo la calzada en la noche del jueves

La roca, cortando por completo la calzada en la noche del jueves

El alcalde de Caso, Miguel Fernández, explicó que "se ha podido abrir porque desde Carreteras se mandó una máquina con martillo, que pudo picar la roca". Era tan grande que moverla era prácticamente inviable. "Han estado trabajando duro, y hoy por fin se pudo romper, y abrir el tráfico otra vez". Más arriba, la misma carretera está cortada desde el pueblo de Tarna por riesgo alto de aludes.

Desde Caso se mira ahora al cielo, para ver cómo evolucionan las lluvias. El año pasado, "en el que no tuvimos casi invierno", gastaron más de 40.000 euros en abrir caminos. "Este año, con un invierno que parece ya más crudo, ver veremos. Es a lo que estamos expuestos ahora los concejos de montaña con este cambio de clima, que lo mismo te nieva que luego te diluvia", añadió el regidor. Afortunadamente, este suceso no causó ningún daño personal.

En marzo de 2018, un gigantesco argayo producido en Anzó (Sobrescobio) dejó prácticamente incomunicado durante semanas el concejo casín. Luego, durante varios meses más, el acceso tuvo que hacerse en precario, por una senda habilitada para ello, hasta que por fin pudo arreglarse todo el desprendimiento.