El conflicto por la subida del menú escolar en dos colegios de las Cuencas: la Policía desaloja a los cuatro padres encerrados en la Consejería

Cuatro horas. Es el tiempo que cuatro padres y madres de alumnos del colegio José Bernardo, en Sama, han permanecido encerrados en la sede de la Consejería de Educación, en Oviedo, en protesta por el incremento del precio del menú del comedor escolar. La Policía Nacional desalojó a los cuatro padres a las tres de la tarde «después de que los manifestantes del exterior rompiesen la puerta principal de acceso al edificio en plena hora punta de salida de los trabajadores», explicaron desde Educación, que señalaron que «ante esta situación se solicitó la intervención de la Policía Nacional».

Tras salir de la Consejería, los padres han pedido la dimisión de la responsable de Educación y han anunciado que seguirán con sus protestas. "Pensábamos que nos podían desalojar pero no tan rápido", explicaba Aida González, una de las madres encerradas. "Ahora vamos a tranquilizarnos y a analizar entre todos cuáles serán los siguientes pasos pero no vamos a parar, vamos a seguir protestando".

Los padres y madres de alumnos de los colegios José Bernardo, de Sama de Langreo, y Vega de Guceo, en Turón, afectados por la subida del precio del comedor (de 5 a 8,25 euros), exigen una solución a la Consejería de Educación. El colectivo ha incrementado su presión sobre el departamento que dirige Lydia Espina y cuatro padres estuvieron encerrados toda la mañana de este lunes en la sede de la Consejería, en la Plaza de España de Oviedo. Medio centenar de personas se manifestaron en la capital, y posteriormente cuatro de ellas accedieron al edificio con intención de permanecer allí hasta que les den una solución.

Aida González, una de las madres que está encerrada afirmó que “no se puede pagar 8,25 euros al día para que el menú de un niño en el comedor de un colegio público”. Desde Educación, se aseguró la semana pasada, que la administración del Principado “ha asumido la subida íntegra del precio del menú de todo el alumnado con derecho a comedor en el CP José Bernardo, de Langreo, pero que carece de respaldo legal para abonar el incremento a aquellos que no tienen derecho a este servicio, al no ser estudiantes transportados, y que lo utilizan como una herramienta de conciliación”.

Los padres quieren “que alguien nos explique cuáles son esos problemas legales de los que habla la Consejera”. Para el colectivo de familias afectadas, tanto en el colegio José Bernardo, en Langreo, como el Vega de Guceo, en Turón (Mieres), “ante situaciones de emergencia se deben aplicar soluciones de emergencia”, en palabras de Aida González. Los padres mantienen que “la subida la debe asumir la consejería, Barbón o quien sea”.

“Sentimos muchísimo que haya afectado a las familias que, de manera habitual o por costumbre, los llevan al comedor y tienen así organizada su vida, pero no podemos hacer nada. Nuestra única opción era hacer el contrato a este precio o no hacerlo”, aseguraba hace una semana la Consejera. Unas palabras que a los padres no les sirven por lo que han decidido encerrarse en la sede de Educación “hasta que nos den una solución”. Además, han entregado 1.500 firmas que apoyan su reivindicación.

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