Exhibición del ciclista asturiano Pelayo Sánchez, que acaba la etapa tercero, en la Vuelta a España

El asturiano Pelayo Sánchez (Burgos-BH) brilló en la complicada etapa de Guadarrama, en la que acabó tercero peleando hasta el final por la victoria, que finalmente fue para Poels (Bahrain Victorious), por delante de Remco Evenepoel (Soudal Quick-Step), que se quedó cerca de ganar su cuarta etapa en esta Vuelta a España. El ciclista de Tellego (Ribera de Arriba) logró meterse en la fuga buena de una etapa de 207 kilómetros, la más larga de la carrera, en la que además tenían que superar diez puertos puntuables. Pelayo, además de un gran escalador, tiene también una buena punta de velocidad, por lo que en un sprint reducido se podía defender bien tras haber aguantado con los más fuertes hasta el final.

El asturiano del Burgos-BH ya venía avisando de su buen estado de forma en las etapas previas, tanto en la del Angliru como en la de La Cruz de Linares, en las que estuvo cerca de los mejores. En la etapa de ayer, logró meterse en una fuga de 31 ciclistas que se formó tras el paso por el Collado del Portazgo, el primer puerto del día. La diferencias con el pelotón fueron creciendo y pronto se vio que en esa fuga iba a estar el ganador de la etapa. Las diferentes ascensiones fueron eliminando a rivales. El asturiano lo intentó por primera vez a casi 70 kilómetros de meta, en el segundo paso por el Alto de Santa María de la Alameda. Pero lo decisivo llegó en la última subida, el Alto de San Lorenzo de El Escorial, donde se fueron sucedieron los ataques. Pelayo demostró estar muy fuerte y se metió en el grupo de cinco corredores que se iban a jugar la etapa. Lo intentó en el sprint y se quedó cerca de una victoria que lleva días persiguiendo. El asturiano, tras cruzar la meta, reconoció que "esta última semana ha sido un sueño, en las etapas en Asturias me encontré con unas piernas que ni yo me lo creía y hoy (por ayer) sabía que tenía que estar en la fuga; con las sensaciones que estaba teniendo creía que podía tener una oportunidad y estuve cerca".

Por otra parte, las audiencias televisivas refrendan el éxito de las dos etapas de la Vuelta a España que acabaron en Asturias. Y es que sumaron 3,9 millones de telespectadores, lo que supone que de nuevo son las que más audiencia tienen de esta competición ciclista. La más vista fue la de Ribadesella-El Angliru, con 2,2 millones; mientras que la de Pola de Allande-La Cruz de Linares (Proaza), tuvo 1,7 millones.

Suscríbete para seguir leyendo