El impulso del sector TIC, la transición energética y la necesidad de incorporar profesionales cualificados a la que algunos han dado en llamar cuarta revolución industrial son, en suma, las razones que aducen los responsables de los colegios profesionales de ingeniería para explicar la alta demanda de informáticos, "telecos" y graduados de la rama eléctrica.

José Antonio Galdón, presidente del Consejo General de Colegios Oficiales de Graduados e Ingenieros Técnicos Industriales de España, sostiene que el proceso de transición energética traerá una demanda de nuevos perfiles profesionales. "Eso hace que la rama eléctrica sea y vaya a ser de las más demandadas", arguye.

El informe "Los + buscados" para 2019 elaborado por una consultora de mandos intermedios y directivos señala que los ingenieros eléctricos se sitúan en el foco de interés de las empresas, con una retribución anual entre 40.000 y 60.000 euros brutos. "La transición energética que nos conduce a una electrificación de la energía hace que sea mayor la demanda de ingenieros eléctricos", abunda Galdón. Por lo demás, agrega el presidente del Consejo General de Colegios de Graduados e Ingenieros Técnicos Industriales, "seguimos detectando falta de vocaciones y, sobre todo, en mujeres". En este último aspecto coincide con el decano del Colegio de Ingenieros en Informática del Principado, José García Fanjul, quien en declaraciones a este diario manifestó que no existe suficiente talento femenino para nutrir a las empresas en sus necesidades actuales de profesionales. Un estudio de la Comisión Europea que toman como referencia los profesionales de esta rama señala que el 90% de los trabajos requerirán en el plazo de dos años de algún tipo de competencia digital pese a que un 40% de los europeos reconocía que no contaba con ellas. "Todo el mundo entiende que la Ingeniería Informática resulta crucial", sostiene Fanjul.

En el Colegio de Ingenieros Industriales del Principado, su decano, José Esteban Fernández Rico, recién reelegido para el cargo, anunciaba esta semana que su equipo se esforzará en poner en valor las capacidades de sus profesionales para afrontar con éxito los nuevos retos de competitividad en las empresas. La prioridad es colaborar con la industria "para ayudar a Asturias a asumir de un modo eficaz los beneficios de las nuevas tecnologías que surgen de la cuarta revolución industrial". En su caso llevan un tiempo sin tener que dar becas a los colegiados recién egresados, ni ayudas de viaje para entrevistas. "Es un indicador relativo, pero constata cierta facilidad para la inserción laboral, particularmente de titulaciones técnicas. Y están creciendo los proyectos y ofertas que solicita ingenierías", concluye.