Fallece Belarmino Alfredo González, pionero en la hostelería Gijón: de lanzar la Discoteca Playboy a crear la leche de la pantera

“Era simpático, sociable y siempre con un chascarrillo”, recuerdan los hijos del hostelero que regentó El Mesón del Gallo, Montmatre, Pub Escocia, Jazz 76 o Torre del Oro

María de las Nieves Vega y Belarmino Alfredo González

María de las Nieves Vega y Belarmino Alfredo González

Pablo Antuña

Pablo Antuña

“Se puede resmir en que fue la hostelería de Gijón, porque estaba en todo, innovándo y atreviéndose. Fue todo un adelantado a su época”. Francisco Javier González Vega, el hijo pequeño de Belarmino Alfredo González Fernández, recuerda al popular hostelero, fallecido este lunes a los 91 años. Conocido principalmente por la Discoteca Playboy o el Pub Escocia, también regentó El Mesón del Gallo, Montmatre, Jazz 76, Torre del Oro o Cafetería La Gloria, desde la década de los cincuenta hasta la de los ochenta, cuando en la última etapa laboral se centró en el comercio.

Belarmino Alfredo González Fernández, nacido en el barrio de Pumarín, vivió posteriormente en Cimadevilla, hasta residir prácticamente toda su vida en el centro de Gijón, en las calles Cabrales y Begoña. Su trayectoria en la hostelería se inicio en El Mesón del Gallo. Aunque posiblemente una de sus épocas más conocidas fue cuando lanzó la Discoteca Playboy 1 en los años sesenta. “Fue la más icónica de Asturias y seguramente de las que más de España, en una época en la que no eran habituales”, rememora su hijo Francisco Javier. “Por allí pasaron Antonio Machín, Armando Manzanero, Ágata Lys, Pajares y Esteso o Danny Daniel”, subraya.

Otro de sus momentos en la hostelería fue impulsar la bebida leche de pantera, “aunque había quién se la discutió, pero él siempre se le atribuyó y la mayoría se lo reconocieron”, explican sus familiares, que también apuntan otras anécdotas y momentos de los que su padre hacía gala: “Organizó en el Pabellón de La Arena el primer concierto juntos en la ciudad de Víctor Manuel y Ana Belén. Montó el primer local con bailes de sevillanas, justo cuando empezaban a ponerse de moda y el jazz del anterior ya se pasaba un poco. Y también montó dos bingos”.

Una vez se apartó de la hostelería se pasó al comercio, con un negocio de material deportivo que montó junto a la familia, en una etapa en la que se mantuvo aún muy activo, ya que estuvo metido en la Asociación de Comercio.

El popular hostelero se había quedado viudo en 2014 de María de las Nieves Vega Trabanco. Dos años más tarde sufrió un duro mazazo, con la muerte de su hijo Víctor Alfredo, que había impulsado el Pub Escocia en su segunda etapa. Ahora deja dos hijos, Pedro Pablo y Francisco Javier; y dos nietas, Eva Cristina González y Hugo González. La capilla ardiente se encuentra situada en el Tanatorio de Cabueñes, donde tendrá lugar la celebración de la palabra este martes a las 19.00 horas, y a continuación sus restos mortales serán incinerados en el mismo tanatorio.

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