El modelo para el hotel en el Monte de Piedad de Gijón: pocas habitaciones y respeto arquitectónico

La constructora gijonesa interesada en adquirir el histórico inmueble de la calle Instituto estudia un estilo "boutique", como el pionero Môderne

Aspecto actual del Monte de Piedad, en la calle Instituto. | Juan Plaza

Aspecto actual del Monte de Piedad, en la calle Instituto. | Juan Plaza / S. F. Lombardía

Un hotel "boutique". Esa es la visión que por ahora tiene en mente la constructora interesada en adquirir el histórico edificio de Monte de Piedad para reimpulsarlo como un hotel. La operación, en conversaciones entre la empresa interesada y Unicaja, propietaria del inmueble, está pendiente de cerrarse pero muy encaminada, con ambas partes de acuerdo en que el edificio, que llevaba años languideciendo, puede tener un nuevo futuro. Cuentan con varios precedente para sostener su idea. Por un lado, la venta de un edificio histórico de este tipo ya se produjo en Oviedo, con la venta del Monte de Piedad en la plaza de la Catedral a la constructora Comansa, que proyectaba, también –la operación lleva sin novedades conocidas un par de años–, un complejo hotelero. Y, a nivel local, la idea de un hotel de tipo "boutique" en un edificio histórico tiene un ejemplo claro para tomar como referencia, el Môderne, inaugurado en 2019.

El inmueble que este hotel "boutique" ya en funcionamiento data de 1931 y fue diseñado por los arquitectos Manuel y Juan del Busto. Los responsables del proyecto explicaban en su día que, ante el auge de los pisos turísticos, apreciaban un interés al alza de visitantes que preferían alojarse en habitaciones o apartamentos que tuviesen algún tipo de "esencia" propia y se alejasen del estilo más homogéneo de buena parte de las cadenas hoteleras. Para este proyecto, que supuso reimpulsar uno de los edificios más históricos de la ciudad y también uno de los mejores ubicados –entre Pedro Duro y Marqués de San Esteban–, se apostó por un modelo de rehabilitación sostenible y que fue mucho más allá de lo que exige la ley, que suele limitarse a obligar a mantener el diseño original de las fachada.

Fachada rehabilitada del hotel Môderne.

Fachada rehabilitada del hotel Môderne. / LNE

Para el Môderne, sin embargo, la propia historia del inmueble se planteó como uno de los grandes atractivos para clientes potenciales. Las piezas originales que se pudieron salvar se mantuvieron y otras áreas deterioradas de las que se podría haber prescindido se reconstruyeron imitando su aspecto original. Cuando un hotel toma como sede un edificio histórico, además, el modelo de negocio se limita necesariamente: el complejo por lo general no puede tener muchas habitaciones ni garantizar que todas sean exactamente iguales. Para los impulsores de este hotel "boutique", que por ahora sigue siendo el único en Gijón, esa limitación supuso una oportunidad, porque las diferencias entre los distintos tipos de alojamientos dentro del propio hotel facilitan que el cliente entienda estar viviendo una experiencia más única.

Para el futuro de Monte de Piedad, y aunque la operación está todavía pendiente de cerrarse, la visión que baraja la constructora interesada busca una idea similar. En Asturias el estilo del hotel "boutique" sigue sin estar extendido pese a que se trata de un tipo de alojamiento más habitual en otras ciudades –nació en Nueva York en los años 80– y resulta, por tanto, especialmente atractivo para turistas extranjeros. Uno de los clientes del Môderne más recordados es Bob Dylan, que se hospedó en 2019.

En líneas generales, si el estilo "boutique" se mantiene como referencia para el Monte de Piedad el edificio se rehabilitará con criterios respetuosos con el inmueble y apostará por un modelo con menos habitaciones, no todas iguales –si la constructora quiere respetar la esencia del edificio y no hacer derribos masivos, los propios dormitorios podrán diferir en tamaño, por ejemplo–, y destinado a un perfil de viajero general pero más orientado a turistas con cierto poder adquisitivo, especialmente en temporada alta. Por ahora, la esencia Art Decó del Monte de Piedad podría prevalecer.

Desde Izquierda Unida, sin embargo, no comparten que se estudie la venta de un edificio que, a su juicio, podría dar un servicio público a la ciudad. El edil Javier Suárez Llana denunció ayer el "saqueo" de un edificio "construido con fondos municipales": "Un edificio construido con dinero público en ningún caso debe servir a un banco para hacer negocio. El Ayuntamiento no puede permitir un expolio de patrimonio público ni avalar que se especule con un edificio histórico en pleno centro de la ciudad". El partido recordó, también, que en campaña plantearon crear en el edificio 22 viviendas para jóvenes en un régimen de alquiler asequible. "Lo que necesitamos las gijonesas y los gijoneses es vivienda pública, no más hoteles", lamentó.

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