Los usos hoteleros de la residencia universitaria de Gijón implican cambiar el PGO

Los usos hoteleros que plantea la Universidad de Oviedo para la residencia universitaria a construir en el campus de Viesques implican realizar una modificación del Plan General de Ordenación (PGO). Así lo aseguró ayer el rector, Ignacio Villaverde, en Oviedo durante la presentación del foro de empleo universitario. Villaverde comentó que la sintonía con el Ayuntamiento de Gijón para realizar este trámite es "total". Según las fuentes municipales consultadas, el inicio de la tramitación de este cambio, que podría tardar varios meses, comenzará a realizarse durante las próximas semanas. "No vamos a desistir de ese gran proyecto que necesita el campus de Gijón", aseguró Ignacio Villaverde.

El proceso para la construcción de la residencia universitaria en el campus de Gijón está siendo largo. De hecho, este edifico se cuenta en la lista de grandes proyectos para la ciudad que no han terminado de ver la luz. Se lleva ya muchos años tratando de sacarlo adelante sin que los esfuerzos hayan fructificado. La Universidad de Oviedo llegó a tener en marcha un proyecto, pero se tuvo que frenar, tal y como recordó Villaverde, a raíz de la crisis por el precio de la energía y el aumento del coste de los materiales que se produjo en el 2022 a raíz de la invasión rusa de Ucrania. Fue en el verano de ese año cuando el propio Rector anunció que había que rehacer el proyecto porque "las cifras no cuadraban". "Los estudios de mercado que hicimos en su momento nos decían que en esas condiciones era imposible", repasó ayer Villaverde. "Hubo que modificarlo todo cuando estábamos ya con el pliego de licitación", abundó.

Lo que ahora plantea la Universidad de Oviedo es que la residencia universitaria no sea solo para estudiantes del campus, sino que el edificio se pueda utilizar también como un hotel en aquellos meses en los que la actividad universitaria descienda por las vacaciones. Eso sí, la prioridad, remarcó Villaverde, seguirá siendo dar cabida a los estudiantes. "Al reorientar el proyecto vimos que de esa manera podría ser viable", remarcó el rector de la Universidad.

Sin embargo, que la residencia universitaria tenga también usos hoteleros no se antoja sobre el papel tan sencillo. Implica realizar una modificación del Plan General de Ordenación, ya que la parcela donde se construirá el edificio, al pie de la escuela de Marina Civil, solo admite usos universitarios. Dicho trámite, puntualizó Villaverde, ya está hablado con el Ayuntamiento y comenzará a ejecutarse en las próximas semanas. A partir de entonces, habrá que culminar el cambio, realizar la licitación y que se pongan en marcha las obras. Es decir, que es un proyecto a muy largo plazo.

A pesar de ello, el Rector se muestra esperanzado. "Es un proceso tortuoso, torturante, largo y complejo, pero no desistimos", agregó. El último proyecto para la residencia fue el primero liderado por la Universidad de Oviedo. Se planteó un complejo con tres edificios, dos para habitaciones y uno de usos múltiples, con capacidad para 210 estudiantes y zonas verdes. La espera por la residencia dura ya más de una década. Antaño hubo otros proyectos impulsados por empresas. En el 2011, bajo el nombre de Alojamientos Gijón, se presentó uno de 23 millones de euros. Tampoco salieron adelante los anunciados en 2015, ni en 2016.

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