La jueza atribuye un delito de robo con lesiones a dos de los tres detenidos por la paliza de El Llano, en Gijón

Un delito de robo con lesiones. Eso es lo que atribuye a dos de los tres detenidos, los dos que son mayores de edad, la jueza que investiga el caso de la brutal paliza del barrio de El Llano. Una paliza por la que M. A. A. M., un conocido camarero gijonés de 34 años, se mantiene en coma inducido en el HUCA debido a las patadas que recibió en la cabeza. La magistrada del Juzgado de Instrucción número 5, en funciones de guardia, mandó esta mañana a uno de los jóvenes a prisión de forma provisional, comunicada y sin fianza, estimando así la petición de la Fiscalía. De igual modo, dejó en libertad provisional al otro, con la obligación de ir al juzgado todas las semanas. Se les investiga, de momento, por un delito de robo con lesiones debido a que, supuestamente, le quitaron a la víctima, tras haberla golpeado un reloj que ya ha sido recuperado.

Los hechos ocurrieron sobre las cinco y veinte de la mañana del viernes. Estos tres jóvenes, tal y como desveló LA NUEVA ESPAÑA en su edición digital, la emprendieron a golpes contra la víctima, de 34 años e iniciales M. A. A. M., que permanece ingresada en el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) desde entonces. Le propinaron patadas por todo el cuerpo, incluido en la cabeza, antes de huir de la escena cuando comenzaron a llegar testigos. Un vecino de la zona y un sereno, que fue quien alertó a la Policía Nacional de lo ocurrido. Los implicados vestían sudadera oscura. Se los cruzó por la calle el sereno. Segundos después, este hombre, José Manuel González Dou, cuando se encontraba en el cruce con la calle María Josefa desde Schulz decidió dar la vuelta por los ruidos que empezó a escuchar. "Estaba a dos calles de donde pasó y empecé a escuchar ‘bum’, ‘bum’, ‘bum’", relató. "Me acerqué a mirar y vi que le estaban dando patadas a lo que parecía un bulto", añadió el sereno. Cuando él se acercó, los jóvenes pararon y huyeron del lugar.

El sereno alertó a la Policía Nacional de inmediato. Los agentes actuaron con rapidez y apenas unos minutos después del ataque pudieron dar alcance a los tres sospechosos poco antes de las seis de la mañana. Los tres fueron trasladados a la comisaría de El Natahoyo mientras los investigadores iniciaban las pesquisas y daban forma al atestado que hoy entregarán a la magistrada de guardia. Hasta el lugar del suceso también se desplazaron efectivos sanitarios para auxiliar al herido, que se encontraba inconsciente. Sufría un traumatismo craneoencefácilo además de contusiones por el resto del cuerpo. "Estamos muy fastidiados. Pasó todo muy rápido. Creemos que fueron a robarle, porque le quitaron el reloj. Estamos a la espera de que le hagan más pruebas", explicó el padre de la víctima en conversación con este periódico.

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