El "piti" transversal

Todo el énfasis en la tribuna de oradores y todos los aspavientos desde la bancada por las afirmaciones del contrario quedan en nada en los cinco minutos de receso en los que sus señorías apuran la calada del cigarrillo en una esquina del edificio de la Junta General del Principado. La sesión de ayer, cansina y pesada, en la que los diputados tuvieron que votar hasta casi rozar las doscientas ocasiones con alguna confusión por medio, no podía sobrellevarse sin cinco minutos para un "piti" transversal. Porque en ese momento no hay colores ni reproches. Son unos cuantos los diputados y diputadas que fuman. Y entre volutas de humo la cosa se relaja: diputados de Vox departen con parlamentarios de izquierdas; miembros del Gobierno dan fuego los de la oposición. Incluso, como hicieron Luis Venta (PP) y Marcelino Marcos (consejero de Medio Rural), se matan las colillas antes de entrar a votar discutiendo afablemente si era mejor mover esta o aquella partida.

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