Asuntos para asustar

¿Cuál es el barómetro económico de España? No son «paladas de lodo» son datos oficiales: el Banco de España confirma que en sólo en tres meses nos hemos comido la deuda comprometida con Bruselas para todo el año. El estatus de España en la UE es de riesgo: respecto a la evolución del PIB, España ocupa la posición 22, mientras Irlanda la 1 y Malta la 2. En proceso de empleo España ocupa el 18. En presión fiscal nuestra posición es el penúltimo (26) mientras Dinamarca es el número uno. Sobre poder adquisitivo, España también el 26 y Dinamarca el 1. Y en deuda pública España está en la 24. En el ranking global, España se ubica en la última posición de la UE27.

¿Cómo afectará a la economía la nueva hacienda catalana? Además de tragarse 15.000 millones de deuda catalana con los correspondientes intereses, habrá que añadir el negativo impacto que tendrá la hacienda catalana que podría suponer unos 30.000 millones al año. Un trágala para ser sufragado con el sacrificio del resto de españoles suponiendo un inmenso perjuicio a la solidaridad.

¿Esto tendrá repercusiones? El cupo catalán pasará de gestionar el 9% al 100% de los impuestos, lo que dañará la sanidad y educación de todas las regiones, especialmente en Asturias altamente dependiente.

¿La mayoría de impuestos van para Sanidad, Educación y para carreteras? En España, el gasto público en sanidad representa el 15% del gasto público total, la educación 10% y en carreteras medio punto, datos que clarifican que los impuestos van principalmente para otras cosas.

¿Vamos como una moto? El crecimiento de PIB de este año coincide matemáticamente con el aporte de los Fondos Next Generation; pero, además, hay otro incremento «ficticio» del PIB por el «efecto burbuja» de la inflación y de la deuda que acumula 455.000 millones de euros en el último lustro. Esto quiere decir que realmente decrecemos, esa es la realidad y es bien palpable en los bolsillos de los ciudadanos. Llevamos varios trimestres seguidos en bajada de exportaciones y de inversión extranjera. El sector industrial ha caído de la cuarta a la quinta posición dentro del marco europeo, superados, por primera vez en la historia, por Irlanda, un país de un poco más de cinco millones de habitantes.

¿Y el paro? La ratio oficial del paro es la más deficiente de toda la zona euro, incluso peor que Grecia. Pero el asunto es aún peor, pues según el nuevo informe del Instituto Juan de Mariana, a pesar del majestuoso incremento de 300.000 empleos públicos en cinco años, el paro efectivo real es de unos 4 millones incrementado por el millón de trabajadores inactivos que no figuran como tal. Del análisis riguroso de los datos se deduce que el empleo es de más temporalidad, más costes laborales y con peor desempeño de la productividad por ocupado.

¿Corren peligro las pensiones? Las pensiones son insostenibles por ser un sistema piramidal con base invertida. Desde 2011 se han evaporado 65.000 millones de la hucha de pensiones y la cual se ha llenado artificialmente con 106.000 millones de deuda, dando lugar a un agujero de 165.000 millones, y aumentando. En un sistema de pensiones sostenible, los impuestos recaudados a los cotizantes se invierten obteniendo rendimientos acumulativos. Así es el fondo de pensiones noruego que posee 1,4 trillones de euros y que obtuvo una ganancia en 2023 de 195 billones de euros, con lo que tienen garantizadas las pensiones de por vida. En España, el dinero que se extrae para las pensiones públicas no se invierte en ningún activo con rentabilidad, simplemente es un dinero que se utiliza para pagar a los actuales pensionados. El sistema necesita una reforma profunda comenzando por que la gente sepa lo que va a cobrar y como puede complementarlo, pero no se hace porque es una bomba de relojería social. La solución, creo, vendrá a la desesperada con grandes recortes estructurales.

¿La inmigración pagará las pensiones? Es una tremenda irresponsabilidad regularizar medio millón de ilegales porque supone un suicidio para el Estado. En la era de la Inteligencia Artificial, de España se van medio millón de talentosos y vienen medio millón sin cualificar.

¿Los servicios deben ser públicos o privados? Los defensores a ultranza de lo público lo parasitan como nicho de poder, mientras, cuando pueden optar, eligen lo privado. Una solución que beneficiaría a todos –por la vía de la competitividad– sería el «cheque sanitario» donde cada ciudadano elige –hospital o médico, público o privado– pagado con la tarjeta única de la SS.

¿Hay solución factible? No sirven parches, habría que dar vuelta al calcetín: abolición de las políticas ideológicas, un nuevo plan educación enfocado en la empleabilidad y en economía, hacer una copia y pega de lo hecho en Irlanda.

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