"Juan Cueto era un adelantado, un descubridor, un pionero que nunca quiso ser un colono; no se quedaba". Con estas palabras definió ayer Javier Cuervo, redactor jefe de LA NUEVA ESPAÑA, al añorado comunicador Juan Cueto Alas. Una reflexión integrada en el tributo al fundador de "Los Cuadernos del Norte" que se celebró en el Club Prensa Asturiana, con la colaboración de Tribuna Ciudadana.

Además de Cuervo, participaron en el tributo la hija de Juan Cueto, Ana Cueto; el periodista Miguel Barrero; el catedrático jubilado y crítico literario Francisco García Pérez; el ilustrador y poeta Jaime Herrero; y Alfonso Toribio, presidente de Tribuna Ciudadana, que actuó como moderador. Todos ellos ofrecieron un retrato humano y próximo de uno de los intelectuales más relevantes de España en el ámbito de la comunicación, durante el último medio siglo. Innovador y audaz, Juan Cueto fue el primer director de Canal + y responsable de su modelo de contenidos, que revolucionó la televisión en España. Antes, ya había sacudido los ambientes culturales asturianos con la revista "Los Cuadernos del Norte".

"Mi padre vaticinó lo que iba a pasar culturalmente a principios del siglo XXI, un poco todo eso que estamos viviendo. Siempre estaba pensando en lo siguiente. Creo, y mucha gente me lo dice, que hoy sería el rey de Twitter. Es un medio en el que se sentiría muy cómodo", afirmó Ana Cueto, que recordó distintos episodios de la vida de su progenitor y reivindicó la relevancia de "Villa Ketty", la casa en la que Cueto residía en Gijón, y que fue escenario de iniciativas y avances como la primera conexión a Internet en España. "Fue en un salón que había en la planta baja, era una especie de prueba. Pero en la historia de esa casa hay un libro o una serie de televisión", señaló.

"Esa conexión de internet es como el Mayo del 68 para el periodismo asturiano: todo el mundo dice haber estado allí", añadió Miguel Barrero, que colaboró con Cueto en el volumen "Cuando Madrid hizo pop: de la posmodernidad a la globalización". Entre todas las facetas del comunicador, Barrero destacó su condición de pionero de la crítica televisiva, y reivindicó su "Guía secreta de Asturias": "No tengo en mente a toda la gente que escribió sobre Asturias, pero creo que Cueto fue el primero que escribió desde una óptica radicalmente alejada del tópico, vertiendo una mirada escéptica, desmitificadora, pero a la vez tierna y cariñosa".

Cueto, que según coincidieron los participantes parecía tener "recuerdos del futuro", era "una persona culturalmente muy rica, muy diferencial", como le describió Jaime Herrero, quien habló con ternura de la amistad que forjó con Cueto cuando llegó a Oviedo, en la década de 1960. Una época en la que también le conoció Francisco García Pérez, quien relató cómo Cueto le hizo de guía de lecturas en la facultad, y cómo después le reclutó para sus "Cuadernos del Norte": "No podía seguir el ritmo de Juan, porque nunca reflexionaba hacia atrás. Juan iba enseguida un paso más allá".