La apertura de un segundo carril de bajada en la calle Nicolás Soria ha servido para minimizar los enormes atascos que se generan en Ciudad Naranco desde que comenzaron las obras de ampliación del puente que sirve de entrada al barrio. La empresa adjudicataria de las obras tomó la decisión de habilitar el paso después de que este diario se hiciese eco de las protestas vecinales por los embotellamientos y de que el Ayuntamiento –según fuentes municipales– mediase para conseguir la apertura de ese segundo carril. “La verdad es que esta mañana (por ayer), a la hora de entrada de los colegios, que es cuando se montan los mayores jaleos, no ha habido casi caravana. Ya me había fijado yo, pero también lo comentaron muchos clientes”, explica el propietario de un negocio hostelero situado en las inmediaciones del puente de Nicolás Soria que prefiere mantenerse en el anonimato.

A las cinco de la tarde, otra de las horas conflictivas en Ciudad Naranco, tampoco se formaron largas colas en el entorno del puente de Nicolás Soria. “Todo lo que sirva para evitar los atascos será bien recibido por los vecinos. Si no hace falta tener ese carril cerrado para que avancen las obras ya tendría que llevar tiempo abierto, eso cae de cajón”, dice Marisa Álvarez, que es la presidenta del colectivo vecinal Activa Ciudad Naranco. “Eso sí, en la rotonda del Luis Oliver volvió a haber las mismas retenciones de siempre. El barrio no sólo tiene el problema de Nicolás Soria”, señala Marisa Álvarez.

La apertura del segundo carril en Nicolás Soria puede servir para aliviar el problema, pero los vecinos han propuesto otras soluciones contra los embotellamientos. Los miembros del colectivo Activa Ciudad Naranco sostienen que los atascos serían más llevaderos si se vuelve a abrir al tráfico la calle Fundación Príncipe de Asturias (la Losa de Renfe), que se mantiene para uso exclusivamente peatonal desde hace meses a consecuencia de la pandemia. También proponen que se permita acceder a la calle Independencia desde la rotonda de la Losa y a través del viaducto Marquina. Actualmente los vehículos pueden usar ese itinerario en sentido ascendente, es decir para entrar al barrio desde Independencia, pero no al contrario.

El concejal de Seguridad, el popular José Ramón Prado, reconoció la semana pasada que el Ayuntamiento está estudiando la posibilidad de poner en marcha ambas medidas, aunque reconoce que esas decisiones no pueden tomarse a la ligera. “Todo hay que estudiarlo. A ver si vamos a sacar tráfico de Ciudad Naranco y lo metemos en Independencia”, explica José Ramón Prado.