Canteli, pletórico con el tirón de San Mateo: "No hay sillas para sentarse, es lo importante"

La oposición al completo posa y brinda con el Alcalde, que anuncia su intención de convertir la Escandalera, cuanto antes, en un gran escenario

El alcalde de Oviedo "satisfecho y feliz" por el éxito de San Mateo: "No hay sillas donde sentarse"

Amor Domínguez

Chus Neira

Chus Neira

Pocos días de San Mateo perdona el cielo y muchos lleva el Ayuntamiento con otro tipo de turbulencias, sean las idas y venidas políticas o los tiempos del covid. Pero ayer, primer día grande de fiestas para la corporación salida de las urnas el 28 de mayo, hubo calma y concilio, al menos en las formas. No llovió por la mañana, durante el reparto del bollo y el nuevo clima político municipal trajo también escenas ya casi olvidadas a la plaza de España, como PP, PSOE, IU y Vox brindando juntos. El Alcalde, Alfredo Canteli, aprovechó para hacer una lectura muy positiva del resultado de este San Mateo, éxito de participación y de tirón en conciertos, calles y terrazas hasta el punto de que no queda sitio: "No hay sillas para sentarse, eso es lo importante", resumió.

Mateín, encarnado por Alfonso Aguirre, junto a las reinas de las fiestas Aleida Noval, Lía Díez y Marta García (de izquierda a derecha). | Luisma Murias

Mateín, encarnado por Alfonso Aguirre, junto a las reinas de las fiestas Aleida Noval, Lía Díez y Marta García (de izquierda a derecha). / Luisma Murias

La normalidad políti ca llevó incluso a todo el grupo municipal socialista de vuelta a misa, con la salvedad de Marisa Ponga, que no estaba ayer en la ciudad. El portavoz del PSOE restaba importancia, en todo caso, a esta presencia en la Catedral: "Es una cita más; como se decía en la Transición se trata de hacer normal lo que es normal en la calle", resumí el jefe de la oposición, Carlos Fernández Llaneza.

Esa normalidad, para Canteli, fue el éxito. El regidor ovetense se felicitó por la participación "masiva" de los ovetenses en "unas fiestas de éxito". Hubo gente en todas partes, recitó, en Porlier, en el Bombé, en el Cristo... "¿Y cómo estaba la plaza durante el pregón? ¿Y Uría con el concierto?". Por todo ello el Alcalde felicitó a los ovetenses, también por su forma de comportarse, por la ausencia de incidentes y concluyó que todo ese público "demuestra que con los chiringuitos el camino es este, la participación es lo que cuenta y el gran ambiente es incuestionable".

Canteli dice chiringuitos donde otros dicen casetas, y esa fue la nota discordante, a pesar de las fotos y los brindis en común, entre el análisis del gobierno y la oposición. Canteli volvió a dejar claro que el modelo anterior de los "chiringuitos tradicionales" no volverá, y el resto insistieron en rescatarlo, con distintos matices. Izquierda Unida habla claramente de recuperar los que hubo desde 1983 hasta 2019: "El rincón cubano", "El Pinón Folixa"... El PSOE admite retomar ese modelo con algún ajuste. Y Vox habla de chiringuitos que no sean "ideológicos" y apunta a las regentados por asociaciones deportivas o por hermandades de Semana Santa, por ejemplo.

Canteli, no. Ayer volvió a hablar de "mantener" el nuevo modelo con la única posibilidad de algún cambio: "Tiene que evolucionar, pero nunca dar marcha atrás". Y aunque no quiso revelar cuáles serán esas novedades, admitió que ya está pensando en "dar alguna vuelta a los chiringuitos, darles más vida, dejar que se personalicen, algún pequeño cambio de ubicación...". El Alcalde acabó dejando ver que la peatonalización de las calles Pozos y Mendizábal dejará más espacio en Porlier y permitirá ubicar allí de otra forma las caseta. Y también que el escenario de Uría podría estar listo mucho antes de lo que se espera. Canteli explicó que la reforma del aparcamiento de la Escandalera permitirá "generar una gran plaza encima, la tapa del parking, de uno diez mil metros cuadrados, algo que no tenemos ahora". Se le hizo ver que esas obras van para largo (al menos año y medio para lanzar los pliegos de la remodelación según estipula la prórroga que se ha impuesto a la actual concesión del parking). Pero Canteli afirmó que es posible hacerlo antes. "Estuve hablando con técnicos que conocen el tema y la plataforma podría hacerse en un tiempo relativamente corto, en dos o tres meses, y luego ya operan desde dentro".

Ese nuevo escenario sería, para el regidor, el ideal para conciertos al aire libre como el de Ana Torroja o el de mañana del Grupo Tekila, emplazados, a falta de otro espacio, en el cruce entre Marqués de Santa Cruz, Fruela, Uría y San Francisco, gracias a la instalación de un camión escenario encajado junto a la bandera de España.

El Alcalde pide al santo que traiga felicidad y trabajo: «Que el nivel de paro siga mejorando» 

El balance de la oposición fue por barrios y con cautelas. El portavoz del PSOE, Carlos Fernández Llaneza, dejó claro que hará su análisis cuando finalicen las fiestas, y que, de momento, se limitaba a felicitarse por el comportamiento de los ovetenses, sin incidentes significativos. Sí avanzó, que su grupo defiende el modelo anterior de los chiringuitos, «un modelo que funcionaba y que la gente había hecho suyo», y sugirió rescatarlo con algún cambio, «con la mayor de las garantías o lo que se quiera, pero merecería la pena».

También sin ganas de entrar en mucha polémica y con ánimo más festivo que de bronca política, la portavoz de Vox, Sonsoles Peralta incidió en que la mañana de ayer era un «momento de hermanamiento», para estar con los vecinos, para pasarlo bien. «Hemos disfrutado de mucha gente, con los ovetenses de los conciertos, con las actividades infantiles y estamos muy contentos de estar hoy aquí en este ambiente tan agradable». Sobre los chiringuitos, eso sí, planteó un «modelo mixto». «No a los chiringuito ideológicos pero sí a los de asociaciones deportivas, hermandades, pueden tener su hueco y es un modelo que es una pena que se pierda». También insistió en que su grupo apoya «un tipo de concierto que no sea solo para bolsillos elitistas, porque no todo el mundo puede gastar cuarenta euros en un concierto».

Gaspar Llamazares, de Convocatoria por Oviedo-IU, fue junto a sus concejales el único representante del «frente laico», pues solo faltaron ellos en la misa de la Catedral. Respecto al asunto principal de si chiringuitos o casetas, deseó que en futuras fiestas «se recuperen aspectos que no deberían haberse perdido como los chiringuitos históricos».

Por último, el Alcalde aprovechó la festividad para pedirle al santo que traiga «felicidad» a los ovetenses y «trabajo». «Que sigamos luchando para generar empleo, que ese nivel de paro siga mejorando». En clave política, su deseo fue que el área metropolitana de la que habla Barbón sea buena para Oviedo y para Asturias «sin protagonismos personales».

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