Aspace se asegura fondos europeos para impulsar su nuevo pabellón en Latores

En la Asociación de Ayuda a Personas con Parálisis Cerebral (Aspace) aseguran que les ha tocado una lotería mucho más importante que la de Navidad. El pasado viernes, mientras escuchaban a los niños de San Ildefonso cantar premios, recibieron la buena nueva: se les conceden 430.000 euros de fondos europeos para construir su nuevo pabellón "Ana Casanueva" en Latores. José Manuel Álvarez, presidente de la asociación, aspiraba a hacer realidad este espacio "con o sin ayuda", pero esta inyección económica acelera enormemente el proceso, que espera llevarse a cabo en 2024. El edificio intentará satisfacer una demanda de usuarios que cada vez es mayor por el aumento de la esperanza de vida. "Va a ser un centro puntero en bienestar para un futuro sin barreras", afirma Álvarez.

El presupuesto total del pabellón roza el millón de euros, por lo que los fondos europeos sufragarán algo menos de la mitad del coste. El resto irá a cargo de Aspace, que se financia a través de los usuarios y sus familias, más allá de donaciones esporádicas o actividades para recaudar fondos. "Queremos involucrar a toda la sociedad. Que sea una obra de todos para la discapacidad", explican. El dinero llegará a Aspace antes de comenzar la obra, que se iniciará cuando las administraciones públicas realicen los trámites pertinentes. "Les pediremos que agilicen cuanto antes estos trámites porque el proyecto es una necesidad real e imperiosa. Una vez esté resuelto, la construcción será inminente", recalca el presidente. Por otro lado, el banco Triodos Bank ya se puso en contacto con Aspace para una posible financiación.

El pabellón "Ana Casanueva" se llama así por el nombre del premio concedido por el empresario y filántropo asturmexicano Carlos Casanueva a Aspace en 2019. La esposa del empresario, fallecida hace siete años, siempre le pedía que ayudase a la asociación "que ya tiene un hueco en su corazón". La obra se desarrollará en dos fases. Primero se construirá la planta baja, con siete talleres, un invernadero, espacios para hacer deporte y un lugar para esperar el autobús bajo techo. Y después, el primer piso, que albergará una terraza para socializar y organizar eventos, además de la parte más ambiciosa del proyecto: una residencia con 15 plazas destinada a personas mayores.

"Nos ha tocado la lotería. El nuevo edificio era una necesidad real e imperiosa", dice su presidente

El nuevo edificio se situará en las actuales instalaciones de Aspace en Oviedo, escasos metros al norte del Colegio de Eduación Especial de Latores, con el que comparten bastantes actividades. La asociación funciona como un centro de día para algunos usuarios, mientras que otros se encuentran internos las 24 horas. Allí cuentan con maquinaria y tecnología imprescindible para ellos. Todas estas personas necesitan una atención muy especializada, que se antoja difícil en sitios no adaptados. José Manuel Álvarez reconoce que el acto de poner la primera piedra del pabellón del pasado mes de octubre era también un órdago en busca de colaboración. "Vamos a necesitar más ayuda. Porque una vez construido el edificio hará falta amueblarlo y dotarlo de equipamiento", espeta.

Aspace tratará de buscar financiación bancaria y llamarán a la puerta del sector privado para culminar el proyecto con garantías. Ahora mismo se encuentran embarcados en el proyecto "ladrillo solidario", que ofrece a las empresas que colaboren con ellos dejar su huella en una pared de reconocimiento. Las personas afectadas por la parálisis cerebral llegan a Aspace derivadas por el Principado. Actualmente, el colectivo cuenta con 120 trabajadores en sus instalaciones. No existe un censo fijo de las personas afectadas, pero se estima que la estadística en Asturias es "una de cada mil". A juicio de la asociación, la pandemia ha supuesto un antes y un después en la implicación regional, que definen como cada vez mayor. Sobre todo, gracias a la ley sobre la acción concertada. "Nos dará cobertura legal, renovación y adaptación de precios", dice Álvarez, que agradece a Melania Álvarez, la consejera de Derechos Sociales y Bienestar del Principado, su implicación para lograr los fondos europeos para Aspace. "Le agradezco el entusiasmo y la ayuda. Y espero que esto no acabe aquí", zanja entusiasmado.

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