La forma de proceder es similar a la de los últimos años, todo parte de una reunión del entrenador y cada futbolista. Acabada la temporada con la sensación agridulce del último choque ante el Huesca (fuera del play-off pero ovacionado el equipo por la exigente grada), llegó el momento de echar la vista al frente. Desde el mismo momento que se confirmó que el play-off se escapaba echó a andar el Oviedo 2018/19. La primera piedra fue decidir sobre los futbolistas con contrato. Ahí fue la reunión, de Anquela con cada futbolista la semana después de concluir la competición. Y después, el club ha pasado a tratar los casos concretos con los agentes. La operación salida comenzó desde aquellas primeras reuniones pero aún tiene efectos. Futbolistas como Pucko o Valentini ya saben las intenciones del club con ellos y sus representantes les buscan acomodo. También algunas circunstancias admiten matices, como la de Cotugno, con el que el Oviedo mantiene abiertas las dos alternativas: que siga otro año o que se marche.

El caso del uruguayo es el que presenta más dudas. El Oviedo está satisfecho con el rendimiento del lateral en la temporada que acaba de terminar, una campaña en la que se alternó con Johannesson en la banda derecha, aunque terminó fuera de los planes de Anquela. De perfil defensivo, no le beneficio el sistema de tres centrales y carrileros largos, aunque acabó formando ante el Huesca como zaguero central. Su saldo no es malo: 21 partidos de titular, el 50%, para un total de 1.863 minutos. Con las cifras en la mano, su contribución fue aceptable.

Juega a favor de su continuidad su proyección, ya que se entiende que a sus 23 años tiene margen de mejora suficiente para rendir a buen nivel en Segunda. La salida del uruguayo solo se contemplaría si fuera el propio futbolista el que solicitara su marcha. El agente de Cotugno tendría que presentar una oferta que, además, satisfaga al Oviedo, ya que perdería un futbolista con contrato en vigor. De darse tal caso (hay conjuntos fuera de España que a se han interesado por la situación de Cotugno al final de la temporada), el Oviedo asumiría su marcha y se lanzaría al mercado para incorporar otro lateral derecho que compitiera con Johannesson.

Al margen de la situación de Cotugno, ahora mismo el Oviedo tiene 17 futbolistas con contrato asegurado respecto a la temporada que acaba de terminar. Los 15 con vinculación desde el pasado curso, además de los dos fichajes anunciados: Sergio Tejera y Richard Boateng. En el bloque de futbolistas con contrato habrá novedades. Pucko y Valentini, jugadores sin peso en los planes de Anquela, conocen desde el primer día que el Oviedo no cuenta con ellos y deben buscarse acomodo en otros clubes. Valentini es el que tiene más cerca una salida satisfactoria para todas las partes. El central mantiene un cartel intacto en Italia, en la Serie B, donde podría regresar tras un año con escaso protagonismo. Verdés es otro que tiene difícil continuar.

El club quiere solucionar todos los casos antes del inicio de la pretemporada, 9 de julio, para que Anquela pueda contar con la mayor parte del bloque de futbolistas del que dispondrá durante la campaña.