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Ziganda tenía razón: un toro ante un notable Oviedo

Los azules completaron una gran segunda parte y sucumbieron por buscar la victoria

La fachada, con escudo. El nuevo lema, ya con el patrocinador, y el escudo del Real Oviedo, en la fachada principal del Carlos Tartiere. | Real Oviedo

Resultado adverso y polémicas arbitrales al margen, cantinela esta común en las semanas, el Oviedo tiene razones para sacar conclusiones positivas del choque. Aunque parezca difícil en las derrotas. Tras una primera parte de superioridad manifiesta de los visitantes, el equipo reaccionó. Arribas ajustó al equipo y Sangalli percutió por todo el frente de ataque, pero fue sobre todo una labor coral. El equipo se lo creyó: robó la pelota al Almería y lo encerró en su campo. Mereció empatar y empató. Pero ahí se pasó de optimista. Quizás tuvo que ponerle algo de freno a la euforia porque el Almería estaba esperando la suya. Sabía que la tendría. Seguramente, los de José Gomes sean el equipo más atractivo en su propuesta de Segunda. Lazo encontró a Corpas y ahí empezó el fin para el Oviedo, que tenía, como advirtió Ziganda en la previa, un “toro” delante.

A los azules les sigue faltando un paso para ser considerados como algo más que un simple animador de la categoría. Por merecimientos, el Oviedo podría sumar un par de puntos más en la tabla, pero su situación no cambiaría en exceso. Se ha mostrado hasta ahora como un equipo trabajado, incómodo para cualquier rival y con argumentos para no pelear abajo, pero falta la prueba d madurez: una victoria ante un rival de prestigio.

Sadiq hizo temblar a la defensa, mejor en la segunda parte

Ni Carlos Hernández ni Christian Fernández estuvieron especialmente acertados ayer. Sufrieron en exceso con las galopadas de Sadiq, delantero difícil de definir. Un portento físico, mejor al espacio que con el balón en los pies. Tras el descanso, el control del delantero mejoró. Parece injusto que los centrales asuman todas las culpas. La mejora del panorama tras el descanso parece cosa del paso adelante que dio al equipo, dejando sin aire al atacante nigeriano. Ziganda sabe que el éxito de su equipo pasa, en primer lugar, por un rendimiento defensivo óptimo, como se vio en el tramo final de la temporada pasada. La primera parte de los uzles muestra que aunque los movimientos estñén automatizados aún quedan cosas por mejorar. Siempre las hay.

Los “penaltitos” VAR y la excusa del contacto para ratificar al árbitro

La llegada del VAR va camino de crear una nueva categoría en el reglamento: los ‘penaltitos’. Son esa categoría que muestran contacto pero sin suficiente entidad como para ser considerado penalti. O al menos no hasta el videoarbitraje. La pena señalada a Carlos es un claro ejemplo. Si el colegiado no la hubiese pitado no parece que el VAR hubiera entrado de oficio. Pero la excusa del contacto (Carlos forcejea con Sadiq en una carga limpia) sirvió para que prevaleciera la primera decisión. El VAR esa herramienta de gran potencial que se pierde en un protocolo oscuro.

Un encendido accidentado y un mensaje de compromiso

El acto de encendido de las letras y escudos del Carlos Tartiere no fue lo brillante que la ocasión requería. Se retrasó media hora y algunos problemas técnicos impidieron que, ante los medios, se encendieran todas las letras. El problema fue resuelto algunos minutos después. El acto sirvió para comprobar el buen rollo entre Ayuntamiento y club, que siguen avanzando de la mano. Uno de mis primeros compromisos era que los asientos tengan color azul y al fin podemos verlo. vamos mejorando el estadio, aunque la pandemia nos ha dado un palo tremendo pero vamos poco a poco”, dijo el alcalde Alfredo Canteli en la inauguración, mientras agradeció a NMR su compromiso con el club.

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