Un pistolero para el ascenso: el Sporting se tira a por Mario González

El Sporting, cerca de cerrar la incorporación del delantero, que llegaría cedido hasta final de temporada

Mario González celebra un gol con el OH Leuven belga.

Mario González celebra un gol con el OH Leuven belga. / J. Sámano / A. Menéndez

El Sporting cada vez está más cerca de hacer realidad el deseo de Miguel Ángel Ramírez para este mercado de invierno, un nueve que aporte gol y variedad de registros a su equipo para luchar por el ascenso en la segunda vuelta. Descartado un Asier Villalibre que optó por permanecer en el Athletic, Jon Karrikaburu –cerca de abandonar el Alavés, donde se encuentra cedido por la Real Sociedad– y Mario González se postulaban como las alternativas más viables. Pero el actual futbolista del Los Ángeles FC, muy del agrado de la dirección sportinguista, cuenta con más opciones de acabar llegando a El Molinón.

González, peleando por un balón con Babin durante un partido con el Tenerife en El Molinón. | Ángel González

González, peleando por un balón con Babin durante un partido con el Tenerife en El Molinón. | Ángel González / J. Sámano / A. Menéndez

El Sporting ha tomado la delantera en la contratación del jugador de Villarcayo a otros clubes interesados, como el Valladolid, gracias, en buena medida, a la disponibilidad económica de la que goza el club de Orlegi, con más de 400.000 euros disponibles para afrontar la operación. González, vinculado al Los Ángeles hasta 2026, llegaría como cedido hasta el final de la temporada y el Sporting asumiría la mayoría de su salario, aunque para inscribirlo el club debe dar deshacerse antes de al menos un futbolista. Diego, cerca del Burgos, y Jeraldino son las salidas más probables, amén de la de Enol, con ficha del filial, rumbo al Murcia.

De este modo, Ramírez contaría con un nuevo atacante que enriquecería una delantera en la que se alternan tres jugadores: Campuzano y Otero (ambos con cinco goles en lo que va de Segunda División) y el discutido Djuka, con apenas dos tantos en diecinueve apariciones, amén de un Jeraldino relegado al ostracismo que apenas ha contado con minutos en tres partidos.

Antes de emprender un camino que le llevó a jugar en diversas ligas europeas hasta poner rumbo a Estados Unidos, González se forjó en el Villarreal. Allí coincidió, en el equipo filial, con el exsportinguista Igor Tasevski, que hacía las veces de segundo entrenador. "Todos nos acordamos de él con mucho cariño. Es un gran profesional y un chico de diez, no dio ningún problema en el vestuario. Solo puedo decir cosas buenas de Mario como persona", explica el exjugador serbio, con el que coincidió durante cuatro temporadas.

"Sería, sin duda, un gran fichaje", asegura Tasevski

El buen hacer de González le llevó a gozar de oportunidades con el primer equipo del Villarreal, con el que jugó hasta seis encuentros. Como futbolista, describe Tasevski, es "rápido y muy sacrificado": "Lo mejor que tiene es la capacidad de desmarque: si ve al mediocentro con el balón controlado, empieza a moverse y usa su velocidad para quedarse solo. Pero también hace grandes esfuerzos para liderar la presión y, aunque no sea su mayor virtud, es capaz de ganar duelos por arriba contra centrales más altos que él. También puede jugar en banda por lo bueno que es atacando los espacios. Sería, sin duda, un gran fichaje para el Sporting".

Después de abandonar Villarreal, González se enroló en el Clermont, de la liga francesa. Pero fue al año siguiente, en el Tondela portugués, donde se produjo una irrupción que se tradujo en 15 goles en 28 partidos y en su fichaje por uno de los grandes del país vecino, el Sporting de Braga, con el que disputó media temporada (con seis participaciones en UEFA y un gol, amén de dos anotaciones en Liga) antes de marcharse cedido al Tenerife para el segundo tramo de la temporada 2021/22.

Durante su estancia en la isla, dicen quienes la vivieron de cerca, González demostró una rápida capacidad de adaptación que le llevó a hacerse un fijo en las alineaciones de Ramis desde el primer momento. Formando una doble punta con Enric Gallego, anotó seis goles en veinte encuentros y a punto estuvo de celebrar un ascenso que se escapó en la última eliminatoria, contra el Girona. En Tenerife aún recuerdan la madurez de un futbolista que no tardó en encajar en el vestuario en un contexto análogo al que viviría de llegar ahora al Sporting.

En verano de 2022, se mudó de Canarias a Bélgica para exhibir de nuevo un instinto para el gol que le granjeó el sobrenombre de "El Pistolero": vio puerta en quince ocasiones con el OH Leuven, lo que llevó al Los Ángeles a interesarse por él. Tras comenzar como titular su experiencia americana, González ha ido perdiendo protagonismo hasta gozar solo de tres minutos en los últimos tres partidos de una Liga que concluyó hace un mes. Ahora, con el Sporting ávido de gol, podría sacarse de rojiblanco la espinita de aquel ascenso frustrado con el Tenerife.

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