Sabemos que una buena noche de sueño repercute en el bienestar y la belleza. Dormir tranquilamente por la noche durante siete horas seguidas sería lo ideal. Por desgracia, a veces nos molestan los mosquitos y el exceso de calor en verano o de frío en invierno. Cuando hace frío, hay que prestar atención a algunos factores, especialmente en el dormitorio.

En primer lugar, si hay corrientes de aire, compramos salchichas adecuadas o creamos las nuestras. Por ejemplo, podemos aprovechar unas mallas viejas y rellenarlas con espuma o calcetines.

También podríamos sustituir las cortinas ligeras de verano por otras de tejido más pesado y oscuro. De este modo, nos resguardaremos mejor del frío pero también de cualquier luz exterior molesta. Por la mañana, sin embargo, abriremos las ventanas para ventilar la habitación, contrarrestando la humedad.

El entorno para dormir debe mantenerse limpio, especialmente para evitar el polvo y los ácaros. También utilizamos luces suaves si solemos leer en la cama, pero evitamos los ordenadores, las tabletas y los smartphones. Estos dispositivos mantendrían la mente demasiado activa al estimularla con su brillo.

En cuanto a los pijamas, hay que preferir las fibras naturales transpirables. Si empezamos a tener frío en otoño, nos pondremos unas de manga larga, con un chaleco debajo. En invierno, si es apropiado, preferimos ropa de dormir de franela o vellón y calcetines o calcetines para los pies. Las camisetas térmicas también pueden ayudar. Lo importante es estar cómodo y cubierto.

En cuanto a la cama, en otoño podríamos mantener las sábanas de algodón. Encima habrá una manta ligera. Los de algodón acolchado son muy útiles y bonitos. También podríamos utilizar mantas de lana o vellón y un edredón ligero. Es mejor colocar varias capas sobre la cama, para que la funda se adapte a nuestras necesidades. Estas sábanas las puedes encontrar en Ikea. Una de las más famosas es el modelo ULLVIDE. Se trata de una "sábana suave y fresca de un tejido con una alta densidad de hilos de lyocell y algodón de cultivo sostenible, dos materiales naturales que transpiran y absorben la humedad para que duermas bien toda la noche".

En invierno, podemos elegir un edredón o nórdico con una funda nórdica más pesada. Las mantas también serán de lana y las sábanas quizás de franela.

Cómo embellecer el dormitorio

Veamos ahora cómo embellecer el dormitorio en las dos estaciones frías del año. En otoño, damos un toque de vida eligiendo sábanas y colchas en tonos naranjas. También puedes adornar la habitación con cojines en forma de calabaza o fundas de almohada con estampados coloridos. Otra idea sería colocar una colcha o funda nórdica con paisajes otoñales evocadores.

En invierno optamos por el blanco hielo combinado con el gris pero con cojines rojos en contraste. Si quieres entrar en el ambiente festivo, elige cojines con forma de reno y estampados que evoquen el ambiente navideño, como chimeneas con medias y paisajes nevados.

Consejos para facilitar el sueño

Hay otros secretos para dormir bien con el calor. Recuerde que se recomienda tener una temperatura en la habitación de entre 15 y 19 grados, preferiblemente fijada en 18. Esto estimularía el sistema termorregulador del cuerpo. Preste atención también a la humedad, que debe ser de alrededor del 50%. Utilizaremos deshumidificadores o humidificadores según sea necesario.

Para relajarse, sería una idea utilizar difusores con aceite esencial de lavanda.

Una taza de té de manzanilla o melatonina al menos media hora antes de acostarse ayudaría a conciliar el sueño.

Es mejor evitar comer demasiado tarde por la noche. Si te da un poco de hambre a medianoche, elige unos frutos secos, por ejemplo.