La proliferación de jabalíes en las zonas urbanas del concejo trae de cabeza a los vecinos. A los destrozos en jardines y huertas privadas, se suman los accidentes de tráfico que ocasionan los mamíferos. Y las administraciones públicas se pasan la pelota. Los conductores presentan las reclamaciones en el Ayuntamiento de Castrillón, éste las envía al Principado y el Gobierno regional las devuelve al municipio. El coto de caza Sierra de Pulide-Nalón solo se puede responsabilizar, según la normativa, de los accidentes que ocurren dentro de la delimitación del terreno acotado: unas 25.000 hectáreas de los concejos de Castrillón, Corvera, Illas, Soto del Barco, Pravia y Candamo.

«Los huertos más próximos a zonas urbanas, como los de El Agüil y los que hay en las inmediaciones del castillo de Gauzón, son los más afectados por los jabalíes, pero también muchos jardines de viviendas de Piedras Blancas y Salinas», señaló un vecino de Raíces. «Los jabalíes destrozan los huertos y en los jardines, pero lo peor es que suponen un grave riesgo para la seguridad vial. En la carretera de Raíces a Piedras Blancas, cruzan a sus anchas y sobre todo por la noche», explicó un conductor que pasó por la experiencia de tener que para su coche para dejar cruzar a una cuadrilla de jabalíes con varias crías. En 2011 murieron en España diez personas como consecuencia de accidentes en el que estuvo implicado un animal, además 84 resultaron heridas graves. «Animales en zonas urbanas siempre hubo, pero en los últimos años es más habitual. Quizás es por la falta de comida o por la abundancia de animales», dicen los vecinos.