Villaviciosa,

Mariola MENÉNDEZ

Melo Amandi, junto a su hermana Ana, lleva quince años tratando de recuperar la raza del caballo autóctono, el asturcón. Asegura que este equino no tiene el reconocimiento que se merece en Asturias, al igual que ocurre con otras razas, porque prima un mayor rendimiento del animal sobre su calidad. Advierte de que todavía se encuentra en peligro de extinción y su objetivo es seguir trabajando, con su familia, para recuperar el asturcón, «nunca hay que olvidarse de lo que tenemos». Amandi subraya que el animal «es salvaje porque quedó en el monte, pero es el más noble que hay».

La cuadra familiar está formada por dieciocho equinos, catorce hembras y cuatro machos. La intención es recuperar esta raza consiguiendo los mejores ejemplares en cuanto a su morfología. «El problema que tenemos es que se hacen cruces, pero yo no cruzo con cualquier caballo». Las características de estos animales son: «Oreja pequeña, perfil de la cabeza subcóncavo (curvado desde los ojos al hocico) y pata fina», apunta Amandi. «Creo que tenemos buenos ejemplares, llevamos quince años compitiendo y ganando varios premios», sostiene el criador maliayés.

Agrega que la clave está en «hacer una selección. Si quieres recuperar una raza, hay que seleccionar». Lo que tiene claro es que «debería haber una mayor protección de la raza y de nosotros mismos, porque no sabemos reconocer lo nuestro». Melo Amandi admite que el asturcón «siempre ha estado mal visto», quizá por su atribuida bravura, que no le ha dado buena fama. Aunque para él son como «sus niños» y anhela esa «libertad que no tenemos nosotros y que no podremos tener». Contemplarles correr en manada con la melena al viento es una sensación que envidia, por lo que no duda en que si fuera posible, le gustaría reencarnarse en un asturcón.

El reto de Mel Amandi es «mantener la cuadra». Aunque «si alguien me diera las gracias, antes de morir, por un desinterés tan grande, lo invito a una copa porque eso me llega al "llombu"», asegura. Ésta no es la primera vez que Amandi se propone recuperar una raza en Asturias, pues afirma que ya lo hizo con el ganado vacuno, en concreto, con la asturiana de los valles, «cuando casi nadie sabía de ella». Lo tiene claro: «Raza que se pierda en Asturias, mientras tenga perres para ella y no dé dinero, ahí estaré para recuperarla». De momento, numerosos premios y reconocimientos a la morfología del animal ya han demostrado el buen hacer de este peculiar maliayés.