Mieres / Langreo,
David MONTAÑÉS
La inesperada decisión del Consejo de Ministros de convertir a Hunosa en el almacén que comercializará todo el carbón nacional mientras dure la crisis generada por la bajada de la demanda del mineral autóctono por parte de las empresas eléctricas ha sido recibida por la patronal del sector con buena disposición. Fuentes de Carbunión explicaron ayer a este diario que «la positiva actitud que está manteniendo en el Ministerio de Industria merece un voto de confianza, aunque debemos puntualizar que esta medida nos ha cogido por sorpresa». Las empresas carboneras están dispuestas a sumar para que la propuesta que está sobre la mesa fructifique, pero esperan que Industria les comunique con urgencia todos los detalles del plan: «Estamos a la espera de conocer cómo se desarrollará esta operación y, por nuestra parte, nos comprometemos a mantener la actividad con total normalidad».
La patronal del sector está decidida a probarse el traje diseñado por el Gobierno central, pero también advierte que se deberá buscar otro modelo si finalmente no se ajusta a las necesidades del mercado: «Si en el desarrollo surgen problemas estamos seguros que se solucionarán gracias a la buena voluntad mostrada hasta ahora por todas las partes implicadas». En este sentido, Carbunión precisó ayer que «el actual Plan del Carbón establece garantías jurídicas para el consumo del carbón nacional y los contratos vigentes con las eléctricas así lo constatan».
Las empresas carboneras están a la espera de que bien el Ministerio de Industria o bien Hunosa se pongan en contacto con ellas para explicar los detalles del programa. De momento, únicamente se conoce que la compañía pública comprará a las empresas privadas el stock de carbón que mantienen como consecuencia de la bajada de la demanda de mineral autóctono. Posteriormente, cuando la coyuntura mejore, comercializará la hulla. «Esta iniciativa no soluciona el problema existente, pero puede ser una solución que permita superar la actual crisis», apuntaron los portavoces de la patronal. Y añadieron: «Nunca barajamos esta alternativa, pero es posible que funcione».
