Tensi Carmona, presidenta de la Federación Asturiana: "Sí que hay machismo en la montaña, igual que lo hay en la sociedad en general"

"Nos estamos echando al monte cada vez más", dice la responsable federativa

Tensi Carmona, en LA NUEVA ESPAÑA, en Oviedo. |

Tensi Carmona, en LA NUEVA ESPAÑA, en Oviedo. | / Miki López

Tensi Carmona sigue viviendo en el pueblo en el que nació en 1974, Rioseco, en el concejo de Sobrescobio, en plena montaña. Es por ello que existe cierta coherencia en que sea ella la primera mujer que preside la Federación de Deportes de Montaña, Escalada y Senderismo del Principado de Asturias (FEMPA). Tras apenas un año al frente, se presentará a la reelección.

–¿Qué significa la montaña para usted?

–La montaña es un medio de vida. Además del deporte en sí que se puede practicar, algunos entendemos el medio natural como el lugar en el que nos gusta estar e incluso, como es mi caso, en el que nos gusta vivir. Nací en Rioseco. Para mí es el medio en el que desarrollo no solo mi ocio, sino mi vida.

–Como persona que habita en el medio rural asturiano, ¿cómo valora su estado?

–Como todo, mejorable en muchísimos aspectos. Tenemos un medio difícil, pero muy agradable para vivir. Hay que tener en cuenta que, evidentemente, las condiciones del medio de montaña no son las mismas que las del medio urbano. Yo vivo en una zona privilegiada, muy céntrica y con conexiones muy buenas. Ya no es solo vivir en la montaña, sino que en cualquier pueblo rural la vida es muy gratificante, pero tiene sus dificultades, aunque la balanza se decanta hacia lo bueno.

–Cuando se presentó a presidenta, hablaba de fortalecer la figura de los clubes como piedra angular de la federación. ¿Lo está logrando?

–Lo estamos intentando, que ya es importante. Cuando nos presentamos teníamos varias cosas claras. La primera de ellas era que este mandato era muy corta, de solo un año, y que íbamos a disponer de muy poco tiempo para desarrollar nuestro programa. Aun así, hemos hecho avances importantes y vamos en la línea de lo que entendemos que debe ser la federación. Los clubes son la piedra angular de la federación, y es necesario potenciar nuestra relación con ellos. Aparte de crear una vocalía de relaciones con los clubes, también hemos sacado una línea de subvenciones para financiar ciertas actividades de los clubes que está funcionando bien. El año pasado partimos de una cantidad de 4.500 euros, y ahora ya está en 7.500.

–También hablaba de potenciar las selecciones autonómicas. ¿Qué han hecho al respecto?

–Nuestra federación ha crecido muchísimo estos años, pero la competición ha crecido aún más. Hemos potenciado la participación de las selecciones en distintos campeonatos y creo que hemos logrado tener buenos resultados: la selección de carreras por montaña es campeona absoluta en categoría masculina y femenina; en vertical, somos terceras en chicas y campeones en hombres.

–Asturias goza de un entorno privilegiado para competir por atraer pruebas importantes. ¿Desarrolla la región todo su potencial en ese sentido?

–Creo que sí. En Asturias hay muchas carreras homologadas de mucha calidad, no solo por el entorno sino por la organización, y de eso nos damos cuenta cuando competimos fuera de la región. Este año, por ejemplo, organizamos el campeonato de España ultra en Somiedo.

–¿Cómo valora la relación de los jóvenes con la montaña?

–Tiene mucho que ver con la relación de la sociedad con la montaña, que cada vez es más intensa, cada vez más gente dedica su ocio a la montaña. Para que los jóvenes vayan a la montaña es muy importante, insisto de nuevo en ello, la figura de los clubes, porque es donde se enseña a ser montañista: a todos los que nos gusta la montaña deberíamos pasar, por lo menos en algún momento de nuestro vida, por un club. En la federación tenemos una vocalía de infancia y juventud y programas para la gente joven, así como equipos de tecnificación para acercar la montaña a los jóvenes.

–Un tema muy en boga es el estado de los refugios de montaña.

–La federación tiene los refugios de La Terenosa y El Llano. El año pasado hicimos una inversión importante en La Terenosa, y ahora estamos haciendo lo propio en El Llano. Ahora que cada vez más federados y no federados se acercan a la montaña…

–¿Cuántos federados hay en Asturias?

–En torno a doce mil, unos mil más que el año pasado. En 2021, pasamos de 8.500 a 14.000 federados. Tras la pandemia, perdimos muchos de esos federados, pero no todos. Retomando lo de los refugios, Asturias no puede perder el tren de los refugios de montaña. Aparte del Llano y La Terenosa, hay otros refugios que dependen del Principado, como el de Brañagallones, que está en mal estado pero nos consta que hay un proyecto, un dinero consignado y una licencia de obra solicitada para arreglarlo. Y en el resto de refugios ha habido obras parciales estos años, sé que se están haciendo gestiones para hacer obras importantes en ellos, que son muy necesarias. Dentro de uno o dos años ojalá se pueda decir que los refugios asturianos están en perfectas condiciones para recibir a los cada vez más visitantes que tenemos.

–¿Es compatible la buena conservación del monte con la afluencia masiva de turistas?

–Hay que buscar siempre el equilibrio. Son los técnicos de los espacios naturales los que tienen que estimar la capacidad de carga de los senderos. Lo que está claro es que nos estamos echando al monte cada vez más. Está claro que entre todos debemos poner las bases para conservar el medio natural, que es lo que debe primar, junto a la seguridad en la montaña.

–Es la primera mujer que preside la federación. ¿Hay machismo en la montaña?

–Sí, igual que hay machismo en la sociedad en general. Hemos avanzado mucho, pero es algo que sigue latente.

–El caso Rubiales.

–Es una vergüenza para todos los que amamos el deporte. Todavía hay determinado tipo de acciones que se ven como normales, y entendemos que debemos seguir poniendo las bases para que no se repitan. Hay que quedarse con que ha sido una lección por parte de las deportistas que han alzado la voz, y que nos lleva a todas a plantarnos y a decir: hasta aquí.

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