Los concesionarios asturianos automatricularon unos 30.000 vehículos en los últimos tres días del mes para, de esta forma, eludir la subida del IVA. Esta operación, según señala la patronal asturiana del sector, ha conseguido paliar la fuerte caída de ventas que se había registrado durante el mes de junio y que las matriculaciones tan sólo se rebajaran un 1,8 por ciento en la comparativa anual.