El Club de Natación Santa Olaya echó ayer el cierre a sus fiestas anuales a lo grande: con una multitud de asistentes y con un menú tradicional para conmemorar, además de su celebración, el Día de Asturias.

Un millar de personas se juntaron en las instalaciones del Club para disfrutar de una comida de hermandad que superó todas las expectativas, hasta el punto de que, según la organización, hubo gente que se quedó sin vale para participar en la celebración. El menú fue sencillo y contundente: fabada y bollo de pan, degustado en la carpa instalada al efecto.

Además de la gastronomía ayer también estuvo presente el deporte, con la Subida a la Campa Torres y las atracciones para los más pequeños con hinchables. Los socios también asistieron a la misa festiva para concluir tres días de intensa actividad con talleres, concursos, torneos, exhibiciones y actuaciones musicales.

El Club regresa hoy a la normalidad y lo hace con una asamblea general extraordinaria de socios en la que se fijarán los plazos para la convocatoria de elecciones a la entidad.