Las naranjas son una de las frutas más consumidas en todo el mundo. Ya sea en zumo, en pastel o al natural, sus propiedades y su valor son muy valorados. Pero, ¿qué pasa con las cáscaras? Lo que posiblemente no sepas es que las pieles de naranja tienen un sinfín de usos en el hogar, así que antes de tirarlas sigue estos consejos para aprovecharlas al máximo.

Pule el acero inoxidable

Si frotas la parte externa de la cáscara de la naranja contra el fregadero o contra otra superficie de acero inoxidable, recuperarás parte de su brillo original a la vez que eliminas los malos olores.Limpia la madera

Llena un bote con cáscaras de naranja y un poco de vinagre. Mézclalo y déjalo reposar varios días. Después solo necesitarás colar el líquido y utilizarlo para sacar brillo a tus superficies de madera.

Como ambientador natural

Una de las formas más clásicas de aprovechar las pieles de naranja es crear con ellas un perfume natural que llenará tu casa de un olor agradable. Prueba a quemar las pieles y notarás como enseguida el ambiente se llena con un agradable aroma. Si tienes una estufa en casa puedes probar a colocar sobre ella las cáscaras de naranja cuando la tengas encendida.

Otra forma de eliminar los olores desagradables en casa es hervir las pieles de la naranja junto con un poco de canela en una pequeña olla.Para absorber el mal olor de la nevera

El frigorífico es uno de los lugares de la casa que más malos olores acumula. Para solucionar este problema, coloca media cáscara de naranja con un poco de sal dentro de la nevera. De esta manera absorberás los malos olores durante al menos dos semanas.

Un repelente de insectos natural

Las pieles de naranja, al igual que las del resto de cítricos, contienen limoneno, un repelente de insectos natural. Si colocas las cáscaras cerca de las ventanas y de las puertas conseguirás alejar a las moscas y a otros bichos.