Mikel Chillida: "Mi abuelo ha sido un artista arraigado a su tierra y, a la vez, totalmente universal"

La Casa de Cultura de Avilés inaugura una muestra de ocho obras gráficas y ocho "pequeñas grandes esculturas" del artista vasco

Alicia Vallina, Mikel Chillida, Mariví Monteserín, Alberto Fernández y Yolanda Alonso, ayer, en la inauguración de la exposición "Eduardo Chillida: Construir el espacio".

Alicia Vallina, Mikel Chillida, Mariví Monteserín, Alberto Fernández y Yolanda Alonso, ayer, en la inauguración de la exposición "Eduardo Chillida: Construir el espacio". / Miki López

Saúl Fernández

Saúl Fernández

La Casa de Cultura de Avilés adelanta el centenario de Eduardo Chillida. Lo hace con la exposición "Construir el espacio", que estará a disposición del personal hasta el próximo 3 de marzo. "Realmente, la efeméride es el 10 de enero de 2024, que es cuando se cumplen los cien años del nacimiento de Chillida", dice Mikel Chillida, director de desarrollo del Chillia Leku y, sobremanera, nieto del autor del "Elogio del Horizonte", pero también de las ocho obras gráficas y las ocho pequeñas esculturas que Alicia Vallina, la comisaria de "Construir el espacio", ha seleccionado para que pasen el invierno en la sala de exposiciones que este verano pasado había acogido un quinteto de retratos de Joaquín Sorolla.

"Tenemos la fortuna de que mi abuelo ha sido un artista absolutamente arraigado a su tierra y, a la vez, totalmente universal", destacó el Chillida que se crió yendo a comer todos los domingos a casa de sus abuelos en San Sebastián y viéndolo "en casa o trabajando" siempre.

"Mi abuelo era una persona muy abierta, muy de casa. Por ejemplo, no tengo el recuerdo de mi abuelo en un bar", confesó su nieto. "Era muy sencillo y muy curioso: nos alimentaba, de hecho, a todos nosotros, la curiosidad", destacó. "Más que de darte respuesta, era de plantearte preguntas", añadió antes de confesar: "Solía decir que él era como un árbol: tenía las raíces en su tierra, pero los brazos, las ramas, abiertas al mundo".

La exposición que abrió ayer tarde es la tercera que se organiza sobre la obra de Chillida en Avilés. Las dos primeras, de la mano de Ramón Rodríguez, fueron en 2006 y 2008. La primera, para celebrar el vigésimo quinto aniversario de los "Príncipe de Asturias" y la otra para presentar su obra cerámica en el Centro Municipal de Arte y Exposiciones (CMAE). "Le acompañaron obras de Tàpies y de Barceló", recordó el propio Rodríguez, que participó en la inaguración junto a otros artistas como Herminio, Esther Cuesta o Carlos Coronas. "Que sean ya tres veces en que se expone la obra de Chillida en Avilés demuestra el interés que ha habido en esta ciudad por su obra".

La obra que adelanta el centenario de Chillida viene, precisamente, del Chillida Leku, que revive tras un cierre temporal de algunos años: "Está genial, está abierto al público, con todos los servicios plenos del museo, recibiendo visitas y más en el centenario de Eduardo. No podemos estar más contentos", destacó el nieto del artista.

Yolanda Alonso, la concejala de Cultura, también habló de Chillida en la inauguración de la muestra: "Era un hombre muy completo en el sentido de sus creaciones, pero también en el fundamento que las sostenía", apuntó la responsable de la política cultural avilesina. "Quiero seguir trabajando para que Avilés sea una ciudad interesante culturalmente y por eso hoy presentamos a Chillida y hace poco hicimos lo propio con Sorolla", resumió la política socialista.

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