Mieres / Langreo,

Julio VIVAS

Lejos de perjudicar a las centrales térmicas gallegas, la entrada en vigor del real decreto del carbón ha beneficiado a estas centrales, que han pasado a quemar un 32% más de mineral extranjero desde el pasado mes de marzo. Ante esta situación, la patronal minera Carbunión estima que «no parece coherente» la actual postura de la Xunta de Galicia, que mantiene su recurso contra el real decreto de incentivos al consumo de carbón nacional.

El gerente de Uminsa y portavoz de Carbunión, José Gerardo Biaín, aseguró ayer que los datos de producción de As Pontes, Meirama y Sabón «evidencian que no están en riesgo, en ningún caso, ni siquiera sus puestos de empleo. El mercado les permite funcionar suficientemente como para ser viables y no tener mayores preocupaciones». Por ello, Biaín cree que la Xunta «debería reflexionar sobre su posición respecto al real decreto. No parece coherente, y menos cuando el presidente del Gobierno gallego, Alberto Núñez Feijóo, salió hace una semana defendiendo los astilleros gallegos, y no haga lo mismo con el carbón español. Deberían de retirar su demanda contra la Comisión Europea».

El aumento del 32% de la quema de mineral extranjero por parte de las térmicas gallegas forma parte de la contestación que la Junta de Castilla y León ha enviado al Tribunal Superior de la Unión Europea para hacer frente a la demanda de la Xunta. El documento explica que el incremento se produjo en los meses de marzo y abril pasados, en comparación con los catorce meses anteriores. No sólo creció la generación eléctrica con carbón importado en Galicia, también lo hizo en un 28,5% la de ciclo combinado de gas.

Sólo en el pasado mes de marzo, las dos centrales que funcionaron en la comunidad vecina con carbón importado produjeron casi 724.000 megavatios. Un año antes, tan sólo había producido 194.000 megavatios. Situación similar en abril, cuando se produjeron más de 521.000 megavatios frente a los 157.000 producidos en el mismo mes de 2010. Con estos datos, el Gobierno castellano-leonés afirma en su contestación que, «las consecuencias en los primeros meses de aplicación de las medidas denunciadas señalan que el impacto sobre las térmicas gallegas está muy lejos de resultar desastroso».

Por otro lado, cuatro meses después de la aplicación del real decreto de incentivos al carbón nacional, todavía no se ha conseguido que las diez térmicas incluidas en la resolución de restricciones por garantía de suministro quemen mineral al ritmo que permita garantizar el cumplimiento de la norma. De hecho, en la provincia de León sólo se está quemando el 60% de lo comprometido; mientras que en el resto de las térmicas se da una situación similar. Entre las justificaciones que ofrece el Ministerio de Industria para explicar esta situación se encuentran las condiciones climatológicas, la atonía de la demanda o los ajustes en el mecanismo de resolución de restricciones por garantía de suministro de Red Eléctrica Española (REE).

Frente al desigual cumplimiento del real decreto del carbón, el sector extractivo también se enfrenta a otro problema, la reducción de la producción de las empresas mineras privadas sobre lo previsto. Así, la rebaja será de un 12 por ciento en función de lo establecido en el Plan del Carbón 2006-2012. Este acuerdo establecía una producción global de carbón de 9,2 millones de toneladas. Sin embargo, y tras la resolución gubernamental tomada tras convocarlas ayudas al funcionamiento de las minas, se estableció una producción total de 8,5 millones de toneladas.

«La Xunta de Galicia debería retirar su recurso contra la Comisión Europea»

<José Gerardo Biaín >

Portavoz de Carbunión