Los planes de mejora de banda ancha podrían cubrir hasta el 98% de las zonas de baja cobertura de las Cuencas

Un informe del Ministerio apunta que hay 1.371 viviendas en "zonas elegibles" para los proyectos de optimización del acceso a internet

Un usuario de internet en Langreo.

Un usuario de internet en Langreo. / Fernando Rodríguez

Cara o cruz. La cruz: hay 1.400 hogares en las Cuencas -cerca de 3.000 vecinos- que tienen una conexión a internet por debajo de 30 megabits por segundo (Mbps). Es decir, a la velocidad que se ofertaba en los años noventa. La cara: el 98 por ciento de estas viviendas están en zonas a las que la tecnología actual ya permite la llegada de la banda ancha. Son los datos que reflejan los últimos informes del Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital sobre "zonas blancas" en los valles mineros, aquellos lugares con una velocidad de conexión por debajo de lo que se considera un mínimo aceptable (los ya citados 30 Mbps). Los Planes de Extensión de Banda Ancha (PEBAS) siguen en marcha y, a lo largo de este ejercicio, están llegando a 200 pequeños y medianos núcleos de los municipios de Aller, Mieres, Laviana, Langreo, Morcín y San Martín del Rey Aurelio.

Es este último concejo el que tiene, actualmente, los peores datos de cobertura. Según el informe del Ministerio, hay 254 hogares con conexiones a muy baja velocidad. La buena noticia es que San Martín también es uno de los concejos en el que la banda ancha puede, técnicamente, llegar a todos los rincones. Además, actualmente está en marcha un plan PEBA que ha llevado, o llevará en los próximos meses, la banda ancha hasta más de ochenta pequeños y medianos núcleos de población.

También hay planes para la extensión de la línea en Aller. De hecho, en este municipio las obras ya están muy avanzadas para llegar a la mayoría de los vecinos. En el último ejercicio, el Plan PEBA ha mejorado las conexiones en la zona media y alta del municipio. Quedan 212 domicilios con mala cobertura de red, prácticamente la totalidad en zonas donde el acceso es técnicamente posible. En Lena, en cambio, solo el noventa por ciento de las viviendas que no tienen banda ancha están en lugares a los que el servicio puede actualmente llegar (112 casas, algo más de 200 vecinos).

Los municipios más poblados de las Cuencas, Mieres y Langreo, no se libran de la brecha digital. El concejo con más vecinos del Caudal ha conseguido reducir sus zonas de baja cobertura hasta casi la cuarta parte durante el último lustro. Y el futuro pinta bien; de las 141 casas con red a muy baja velocidad, 138 están en lugares donde la tecnología actual ya permite extender la banda ancha. Balance similar en Langreo, que tiene 204 viviendas sin banda ancha. Todas son susceptibles de acceder a la tecnología.

Inversión

La inversión es, por tanto, la pieza clave para resolver los problemas de desigualdad tecnológica. Unos problemas que, afirman los vecinos, "son aún más acusados en la zona rural. Las zonas que, a la vez, más necesitan la red". Llaman la atención sobre la necesidad de acceso a la banca digital y a los servicios de las administraciones online, entre otros. "Cada día es más necesario. Estamos en el siglo XXI, hay que terminar con la brecha digital ya", señaló Arsenio Díaz Marentes, presidente de la Agrupación Vecinal de Mieres.

La expansión de la banda ancha sigue. Más lenta de lo que les gustaría a los vecinos, pero imparable. A lo largo de este ejercicio, el plan PEBA llevará internet a alta velocidad a 200 núcleos que han estado prácticamente desconectados. Puesto en marcha en el año 2005, el Ministerio impulsa este proyecto para la mejora de las conexiones a la red. Solo durante 2021, la región recibió 12,2 millones para seguir extendiendo la banda ancha. En 2022, a través del Ministerio, se destinaron 4,3 millones para llevar la banda ancha ultrarrápida a 2.500 hogares de toda Asturias -esta vez, a través del programa UNICO-.

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