El "kamikaze arrepentido" de Langreo: dio la vuelta en la autovía de Riaño, condujo en sentido contrario y al kilómetro detuvo su vehículo

Agentes de la Guardia Civil de Tráfico de Langreo han procedido a "la toma de manifestación en calidad de investigado" de un conductor, al que se acusa de ser supuesto autor de un delito de conducción temeraria. La persona investigada, según la benemérita, "habría circulado en sentido contrario del estipulado por la AS-17 (Avilés-Riaño) durante un kilómetro", en cuyo recorrido se encuentra un túnel, "llegando a cruzarse con varios vehículos que circulaban en sentido correcto". Tras circular en dirección contraria, acabó arrepintiéndose de lo que hacía, y paró el coche en uno de los carriles de la autovía.

Tal y como explica la Guardia Civil, el suceso se produjo el pasado 21 de enero, sobre las 10:40 horas. El vehículo circulaba por la carretera AS-17 (autovía de los túneles de Riaño) en sentido Avilés, cuando su ocupante, que se dirigía hacia la localidad de Avilés, "observó cómo se le encendía un testigo en el cuadro de mandos del vehículo, advirtiéndole de una avería". Al ver dicha incidencia, "decidió arrimarse al arcén izquierdo y dar allí mismo la vuelta, circulando por la plataforma sentido Avilés en sentido Riaño", y recorriendo en su totalidad el túnel de Cadaval Norte I, ubicado en el término municipal de Langreo, de un kilómetro de longitud.

En su trayectoria, "se fue cruzando con varios vehículos que le realizaban avisos con señales luminosas. "Al percatarse de su error", subraya la Guardia Civil, el acusado "decidió parar el vehículo ocupando el carril izquierdo, según el sentido correcto de la marcha". Tras recibir la alerta en la Central Operativa de la Guardia Civil de Tráfico (COTA), inmediatamente se desplazó una patrulla del Destacamento de la Guardia Civil de Tráfico de Langreo hacia el lugar. Una vez allí, los agentes procedieron a "retirar el vehículo del carril en el que se encontraba hacia el arcén, ya orientado correctamente, neutralizando de este modo el peligro de accidente que todavía existía", puesto que el coche ocupaba el carril casi en su totalidad. El conductor fue sometido a las pruebas de alcoholemia y drogas, "las cuales arrojaron resultado negativo".

La Guardia Civil subraya que las distracciones "siguen siendo una de las principales causas de accidente, siendo aconsejable poner toda nuestra atención a la conducción y a las maniobras ejecutadas en la carretera". Ante "una situación de estrés que se nos produzca en el transcurso de la conducción", lo más aconsejable es "detener el vehículo en un lugar seguro para poder evaluar la situación con calma, llamando a los servicios de emergencia si fuese necesario".

El caso lo están instruyendo en los juzgados de Langreo.