Comienza la ampliación del "grifo de Asturias", la potabilizadora del parque natural de Redes de la que sale el 98% del agua de Cadasa

La ampliación del "grifo de Asturias", la potabilizadora que el Consorcio de Aguas de Asturias (Cadasa) tiene en el parque natural de Redes, ya está en marcha. El primer paso se está ejecutando con el derribo y limpieza de la antigua piscifactoría, en cuyos terrenos se levantará la ampliación de la estación de tratamiento de agua potable (ETAP). Las obras de desmantelamiento y demolición de la piscifactoría del Alba fueron adjudicados en 1.194.270 euros y tienen un plazo de ejecución de ocho meses. Las empresas concesionarias de los trabajos son Contratas Gonzalo Pérez S.L. y Contratas Mota, S. A. A continuación, una vez terminadas estas obras, Cadasa tiene previsto usar los terrenos liberados como área de expansión de la potabilizadora, de la que sale el 98% del agua que gestiona el Consorcio.

Los terrenos y la concesión administrativa de aguas de la piscifactoría fueron adquiridos por Cadasa en 2019. Además del desmantelamiento del antiguo criadero de truchas –ya está derribado–, la actuación incluye el relleno de los suelos para que queden protegidos de posibles crecidas del río Nalón. Se va a construir un pedraplén (tipo de escollera de roca) de 50.000 metros cúbicos, con una altura máxima de 5 metros y un talud extendido próximo al río. Finalmente, se procederá a la revegetación de los taludes.

La actual planta de tratamiento de agua tiene una capacidad máxima de 3.200 litros por segundo y fue construida por la Confederación Hidrográfica en 1982. El proyecto de ampliación incluye un nuevo depósito de agua, además de un laboratorio central y de una nueva potabilizadora, que tratará el caudal de la antigua piscifactoría, cuya concesión era de 1.000 litros por segundo. Así, Cadasa podrá suministrar hasta 4.200 litros de agua potable por segundo al sistema de suministro del centro de Asturias. Esta iniciativa es la más costosa de las previstas por Cadasa en su plan de inversiones, ya que las obras costarían, según las previsiones, 14,5 millones de euros.

La potabilizadora, ubicada en la zona de Comillera, trata el agua procedente de los embalses de Tanes y Rioseco. Supone el 98% que gestiona Cadasa, que da de beber a 800.000 asturianos y abastece también a las principales industrias de la región.

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