Cuatro socios del Grupo Covadonga impulsan una moción de censura que la directiva considera "electoralista"

Cuatro socios del Grupo Covadonga, en plena recta final del mandato de la entidad deportiva, que convocará elecciones en el primer trimestre del próximo años, han activado el proceso de recogida de firmas para presentar una moción de censura contra el actual presidente, Antonio Corripio, que por las fechas del proceso tilda el proceso de "electoralista". Los impulsores son Adolfo González Posada, Jaime Viña Olay, Sergio Álvarez González y Melchor Fernández, que acaban de registrar la petición alegando una "desastrosa gestión" de la entidad y la "incapacidad manifiesta para dialogar" que a su juicio sufre Corripio tras su "enfrentamiento" con el Ayuntamiento por la polémica del plan de renaturalización del Piles. El presidente, pese a que aclara que "respeta" un proceso de moción permitido por los estatutos grupistas, asegura que la medida "tiene un claro objetivo electoralista", y que "su único propósito es el de ensuciar y enturbiar la próxima campaña electoral".

El proceso se inició este miércoles, cuando los cuatro socios presentaron un escrito conjunto ante la comisión del Grupo para solicitar el envió de la documentación necesaria para poder activar el proceso de recogida de firmas. En él, se detallan tres motivos que a su juicio justifican la moción. En primer lugar, alegan el supuesto incumplimiento al derecho de los socios a tener "a disposición" la documentación interna del Grupo para poder someterla "a examen". En segundo lugar, reprochan una "gestión desastrosa de los recursos del club", porque, según ellos, la directiva ha "malgastado" dinero de la entidad en indemnizaciones a trabajadores por despidos improcedentes. Los promotores de esta moción de censura, por último, alegan la citada "incapacidad manifiesta" de Corripio para dialogar "con otros estamentos", algo que a su juicio se demuestra ante su "enfrentamiento" con el Ayuntamiento y las demandas judiciales que se han presentado para que el plan de renaturalización del Piles no suprima el anillo navegable.

Corripio, por su parte, aclara que cualquier iniciativa de los socios del Grupo "merece todo el respeto", pero se muestra dolido por los argumentos esgrimidos. No comparte, por ejemplo, que se reproche la gestión de la entidad. "El cierre de este ejercicio ha sido a todos los niveles histórico", defiende el presidente, que asegura que este 2023 "ha supuesto un récord de inscripciones en actividades ofertadas" y que, desde 2016, cuando la actual directiva inició su primer mandato, los balances anuales se han cerrado en positivo y con "increíbles resultados deportivos".

El presidente del Grupo vincula esta moción de censura a intereses "electoralistas" y asegura que "busca crear un debate inexistente, anticipando una propuesta electoral artificial". Afirma, también, que los cuatro socios impulsores son "personas que no están involucradas en la vida diaria del club y que lo visitan de manera excepcional". Reprocha Corripio un "movimiento electoral del todo anacrónico, que pretende enturbiar la situación actual de cara a las próximas elecciones", y critica que el proceso responde "a claros motivos personales" que quiere "desenmascarar". Se muestra especialmente crítico con Viña, de quien asegura que "pasará a la historia del Club como uno de los peores vicepresidentes del Grupo desde su fundación". Y asegura: "Su animadversión hacia la actual junta directiva comenzó el mismo día que su esposa no accedió a las condiciones del puesto de trabajo al que se había presentado, el de docente de la actividad de ballet. Desde entonces, y en repetidas ocasiones, se ha intentado autoproclamar, a través de diversas plataformas, como representante de los socios del Grupo, fracasando estrepitosamente en cada uno de esos intentos". Corripio vincula a Viña a Melchor Fernández, quien asegura que "ha formado parte de las mismas juntas directivas" que el antiguo vicepresidente y que ambos han sido "compañeros" en esas plataformas que menciona.

Sobre los otros dos firmantes de la iniciativa, el presidente asegura que son "antiguos proveedores de la entidad": dice que uno de ellos "tiene un negocio de pinturas donde se domicilia la moción de censura" y que el otro gestiona "una marca de bebidas carbonatadas que no se consume en el club desde el año 2017". Se calcula que las elecciones del Grupo se celebrarán en el primer trimestre del próximo año.

Mientras, Antonio Corripio se cita hoy con el gobierno local –con el segundo teniente de Alcaldía, Jesús Martínez Salvador, y con el edil de Medio Ambiente, Rodrigo Pintueles–, en la que será la última reunión formal del bipartito con otras entidades este año. El gobierno defiende mantener aún su promesa estudiar si tras el plan de renaturalización –que se mantiene íntegro para no perder fondos europeos– se puede mantener la actividad deportiva en el río, y los grupistas quieren un compromiso en firme.

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