Opinión

Importancia de la alta velocidad en Asturias

Un tren para facilitar el intercambio industrial y económico y no solo para el ocio

Importancia de la alta velocidad en Asturias

Importancia de la alta velocidad en Asturias

Como contar una historia que comienza hace más de 30 años, la famosa variante de Pajares. Difícil objetivo, hemos asistido como siempre a las presentaciones falaces de nuestra clase política, y aún seguimos esperando que en algún momento algo de lo prometido en tantas y tantas ocasiones, sea cierto.

Hace unos meses, se presentó a bombo y platillo que Asturias tenía por fin alta velocidad, y nos lo creímos. Nada más allá de la realidad, parece que no aprendemos, lo que realmente tenemos es el mismo tren, pero con otro recorrido, en lugar de ir casi andando cruzando nuestros montes, por fin, después de más de 30 años, lo hacemos por debajo, hemos estrenado el famoso túnel. Un túnel, que ha permitido rebajar el tiempo de recorrido hacia la capital en casi una hora, pero que no es suficiente.

Parecería una buena noticia si no fuera que va acompañada de no pequeños inconvenientes, comencemos con alguno de los problemas que nos encontramos. Al no ser alta velocidad no tenemos ninguno de sus beneficios, por ejemplo, no tenemos abonos para poder viajar como el resto de pasajeros ya que no nos corresponden esos descuentos, usted puede ir desde León a Madrid en AVE y tiene su abono de 10 viajes a un buen precio, pero si sale desde Asturias no, ya que no tiene alta velocidad. Aún hay más, si usted viaja desde Asturias tiene la ventaja de ir parando en las estaciones de Mieres, León, Palencia y Valladolid, para llegar a la capital. Curiosamente dos de estos destinos tienen alta velocidad y varias salidas y llegadas a lo largo del día. Sigamos, si usted tratara de combinar horarios para poder llegar a su destino de una forma más rápida no podría, ya que los horarios de la no alta velocidad no coinciden con ninguno que usted pueda combinar, así que no lo intente. Una buena solución, sería comenzar nuestros itinerarios de largo recorrido a la misma hora que el resto de destinos con alta velocidad para ser más competitivos, pero eso no es aún posible, ya que mismo tren mismo horario, o que esperaban.

Por si todo esto no fuera suficiente, la cosa se pone más interesante. Este mes de marzo del 2024, entraban en funcionamiento los famosos Avril, alta velocidad con nuevos horarios y más salidas y llegadas, pero no, fallos técnicos impiden que se pueda poner en marcha y obviamente seguimos sin alta velocidad. Del AVE ni siquiera hablaremos, es ciencia ficción sabemos que existen, pero es probable que no los veamos funcionar nunca en el Principado. Esta semana han oído seguramente que tenemos 3.000 billetes en compensación a 25 euros, les invito a que intente viajar con ellos ya que puede que si viaja por trabajo en lugar de ocio y tiene que cumplir unos horarios no puede hacer uso de ninguno de estos billetes, o bien uno si y otro a precio no competitivo. Por lo tanto, otro engaño más.

Otro tema son los destinos, si oye hablar a nuestros políticos, estas supuestas mejoras iban a potenciar nuestra industria turística, cosa que está claro que con este panorama no se sostiene. Este discurso mantiene una imagen minimalista del desarrollo económico del Principado, si miramos a nuestro potencial humano según la formación que se realiza en nuestra comunidad en tecnología e innovación, la alta velocidad debería posicionarnos como un buen destino de desarrollo industrial, y así nuestros jóvenes altamente preparados podrán desarrollarse profesional y personalmente. Pero para ello debemos ser accesibles, la comunicación es el motor real para el desarrollo de un enclave industrial, pensar que la gente solo viaja por y para el ocio es una visión reduccionista. Invito a cualquier analista social a que estudie el perfil de las personas que viajan a diario en estos trenes, no veo tanto ocio, veo más bien negocio. Por ello reivindico recorridos que faciliten el intercambio económico e industrial, en tiempo y forma. Que se dejen de promesas y se forjen realidades.

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