"Fue una venta normal", dicen los acusados de estafar a una septuagenaria

"Fue una venta normal. Ella era plenamente consciente". Así se defendieron ayer en los Juzgados de Llamaquique el administrador de una empresa de venta de productos a domicilio y un comercial acusado de estafar a una mujer mayor de Trubia en 2019, cuando la víctima tenía 72 años. La Fiscalía y la acusación particular coinciden en asegurar que ambos sospechosos sabían que la mujer tenía pendiente el abono de varias mensualidades de una compra previa a otra compañía para prometerle que si pagaba 1.300 euros en efectivo se libraría de dicha deuda y le regalarían un surtido de ibéricos, un reloj, un set de sartenes y una colección de sistemas de medicina. Al final pagó, las mensualidades adeudadas siguieron llegando y de lo prometido, según indicó, solo recibió un jamón, un lomo y un chorizo.

Los procesados lo negaron todo ante el Juzgado de lo penal número 1, mientras que la víctima ni siquiera pudo ir a declarar debido a su avanzado deterioro cognitivo, que le ha llevado a ingresar en una residencia de mayores. Sí lo hizo su nieta, la cual aseguró que este tipo de empresas siguen llamando a casa su abuela para ofrecerle productos.

Las defensas alegaron que los hechos tuvieron lugar año y medio antes de que se le diagnosticaran a la mujer los problemas de deterioro cognitivo. Ambos pidieron la libre absolución de su cliente frente a la petición de 18 meses de cárcel del fiscal y los dos años pedidos por la familia de la víctima. El juicio quedó visto para sentencia.