Un referente del atletismo nacional en la falda del Naranco

Oviedo contará a partir de la temporada 2024/2025 con un nuevo equipamiento deportivo de referencia nacional e internacional. La nueva pista cubierta del Naranco que se empezará a levantar este año en Prados de la Fuente nace con la vocación de ser la joya de las competiciones regionales, una de las mejores de Europa y tener la capacidad y el atractivo para traer a Oviedo campeonatos de España y del mundo de primer nivel.

Para lograr ese resultado, cubrir el hueco que dejará la vieja pista de atletismo del Palacio de los Deportes y elevar la apuesta, la Concejalía de Deportes se ha tomado todo el tiempo necesario para consensuar el proyecto con las federaciones de atletismo regional y nacional y con las de árbitros, asegurándose que el edificio, para un mínimo de 3.000 espectadores, cumplirá con todas las homologaciones necesarias y que permitirá desarrollar un proyecto a largo plazo en la élite de este tipo de infraestructuras.

En concreto, la pista del Naranco, que sale a licitación con un presupuesto de partida de 22,8 millones de euros, cumplirá todos los requisitos de competiciones oficiales de ámbito autonómico, nacional o internacional, por lo que contará con el Certificado de Homologación de la instalación, tanto de la RFEA como de la World Athletics Indoor. Más allá de la cuestión deportiva, el edificio también pretende ser un icono del diseño de instalaciones a nivel nacional e internacional, y será, por tanto, un espacio único, singular y reconocible que se asocie y posicione la imagen de Oviedo a través de los eventos que allí se realicen, y de la difusión de los mismos.

En este sentido, y para agilizar al máximo el proyecto sin perder atractivo, el Ayuntamiento ha optado por una licitación de proyecto y obra, de forma que lo que se contrata ahora cuenta ya con un extenso anteproyecto realizado por el área de Infraestructuras. La mayor parte del trabajo técnico ya está hecho. La empresa que obtenga este concurso tendrá que resolver solo la solución para la envolvente exterior, condicionada a una serie de indicaciones que ya constan en el anteproyecto y que inciden en el aprovechamiento de la luz y la necesidad de optimizar el consumo energético, y ejecutar las obras.

Respecto al contenido, la homologación tipo C de la Real Federación de Atletismo con la que contará la pista supondrá que el nuevo edificio cuente con 200 metros de anillo con siete calles y ocho en línea recta; zona de caídas para saltos (homologadas IAAF); círculo y zona de caída peso con protecciones (homologada IAAF); instalaciones para video-finish; salas para secretaría, servicios médicos y control de dopaje y medios de comunicación; zona de calentamiento de atletas; zona para cámara de llamadas; un graderío para 3.000 espectadores; un sistema de megafonía; calefacción y un vídeo marcador. Además, la altura libre al suelo será, al menos, de 14,00 metros, lo que permite celebrar otro tipo de competiciones.

En conjunto, se trata de una edificación de aproximadamente 9.000 metros cuadrados de superficie cubierta con unas luces libres de cubierta de en torno a los 80 metros, que se ubicará en el entorno de la pista finlandesa, entre el Instituto Monte Naranco y el colegio Loyola, en la parcela de un fallido proyecto de un spa.

La ubicación prevista, según los sondeos realizados y conforme a la experiencia edificatoria que se tiene en el ámbito urbanístico de Prados de la Fuente en el que se enclava, y que durante años fue un antiguo vertedero, hace que las condiciones de implantación de una edificación de esta magnitud a efectos de cimentación sea especialmente compleja.

Envolvente exterior

El proyecto no olvida que se trata de un edificio de grandes dimensiones en una zona crítica, en la falda del Naranco, junto a la pista finlandesa, y propone que el proyecto aproveche la trama urbana del entorno, no solo por la oportunidad de tener a sus espaldas grandes zonas verdes pertenecientes a las laderas del Naranco, sino porque el desnivel del terreno, a lo largo de la calle Hangzhou, se puede aprovechar para reducir el impacto. Con esta diferencia de cota, "se abre la oportunidad para minimizar el impacto, integrándo al máximo el edificio y abriéndolo hacia esos espacios verdes, tanto interiormente con vistas, como exteriormente con el tratamiento de las zonas exteriores que rodean el edificio. Se juega con los niveles tanto en el interior como en el exterior, ya que sólo con la envergadura de la pista de 200 metros en sí nos hace darnos cuenta del elemento invasivo que se plantea y la principal preocupación es conseguir el menor impacto visual posible". Esa forma de integrar la pista de atletismo en el desnivel pasa por establecer distintos accesos a distintos niveles de cota que se corresponderán con las estancias de cafetería, espacio para deportistas o gradas para el público.

Así, en la zona bajo las gradas, se ubican, además de los vestuarios, zona de taquillas, control antidopaje, sala médica, sala de fisioterapia, vestuarios de jueces, sala de descanso, sala de premiación, zona de calentamiento, cámara de llamadas, varias salas destinadas a mantenimiento, una gran cafetería, locales de dirección, sala de formación, sala de descanso de voluntarios, almacén de equipamiento deportivo y ascensores y escaleras de comunicación con las plantas de público. En ese mismo nivel de la planta baja se encuentra también la propia pista de 7 calles de 200 metros con sus equipamientos adyacentes.

En el anteproyecto se han diseñado unas gradas con una capacidad de 3.099 asientos más 96 espacios adaptados a personas con movilidad reducida, con un total de 3.195 espectadores.

El ámbito deberá estar dotado de un aparcamiento al servicio del pabellón, que según la normativa vigente del Plan General ofrecerá al menos 125 aparcamientos.

La envolvente tendrá elementos que den sombra en la fachada este y oeste, la norte sin huecos, grandes vidrios con control solar y el sistema de ventilación y mejora térmica con huecos se extenderá por el sur, para mejorar el confort y la vida del edificio.