Gijón, María IGLESIAS

La violencia callejera como «búsqueda de identidad» es la realidad cotidiana de las tribus urbanas de la Inglaterra de la década de mediados de los 60. A través de tres títulos con nombre propio, los cineastas Barney Platt-Mills (director de «Bronco Bullfrog»), Horace Ove (director de «Pressure») y Kevin Sampson (guionista y escritor de «Awaydays») presentaron ayer los títulos que participan en el ciclo «This is England», que acoge este año el Festival de Cine de Gijón.

«La violencia no se debe glorificar, es horrible; pero forma parte de una expresión», aclaró Sampson, en cuya novela habla del «tránsito doloroso de la adolescencia a la madurez». «Los primeros pasos del punk, de los rockies, de los mod, etcétera, respondían a algo, a una necesidad de los jóvenes de salir del sustrato en el que viven», añadió.

En este sentido, Platt-Mills considera que «todavía existe mucha desigualdad entre clases, la violencia en mi película no es muy realista, pero se presencia como un modo de amenaza», aclaró el director. Más verosímil es el ataque que sufre una banda de «Black power» en la película «Pressure» de Horace Ove. «No les dije a los negros reunidos, que la policía que iba a entrar a detenerlos eran actores», explicó el cineasta. Para llevar a cabo estos títulos, los directores partieron de un punto común: «el conocimiento de la realidad, saber cómo son y cómo viven las tribus urbanas».