Oviedo, J. B.

El concurso y muestra de folclore «Ciudad de Oviedo», que organizan el Ayuntamiento y LA NUEVA ESPAÑA, va a cumplir 18 años en la escena, y eso significa que ya tiene sus clásicos. Participantes de altura que han desfilado en diversas ocasiones, caso de Faustino Braña Peláez, que ayer abrió la sesión en el teatro Filarmónica. Pero el concurso ovetense, que dirige Carlos Jeannot y presenta Esther Fonseca (en enero regresan las transmisiones por TPA), ha sido también una escuela de cantera de primera magnitud. Los resultados ahí están: desde Hevia a Anabel Santiago, y tantos que, con el tiempo, han hecho carrera. Ayer la sorpresa (muy grata) fue Álvaro Álvarez, que muy joven aún dejó un buen regusto en todos con su soltura y sus buenos apuntes técnicos. El gaitero tiene nivel y tiene un buen futuro por delante. Fue despedido con una larga ovación. Por cierto, el otro gaitero, Borja Rodil, también recogió aplausos. Ya la pasada temporada demostró su categoría. Ayer convenció con las dos piezas, una de ellas «El Trasgu saltarín», obra del presidente del jurado, Alfonso Sánchez Peña. Y por combinar con estas nuevas generaciones, un clásico del certamen: Horacio Huerta Jove, que también dejó constancia de su altura interpretativa. Completó una brillante actuación en sus dos piezas. Otra clásica del concurso, María Sánchez, cerró con honores y entre sus interpretaciones hizo un superclásico del repertorio, «Anda y señálame un sitio». Y otro habitual de este concurso, además de consolidado en la escena de la tonada, fue Julio Antonio Mallada, siempre muy sólido en sus actuaciones. Esta modalidad la completaron Claudio González y Severino García, entre ambos despacharon también piezas con tronío, como «Arrea Carretero o «Emigrante que te vas», por citar un par.

Fue un placer observar la concentración de la pareja de baile formada por Margarita y José Luis Fernández. Desde bambalinas se plasmó su profesionalidad y hasta cómo se refrescaban con un poco de agua para no bajar el nivel ni un ápice. Es una modalidad ésta cuyos protagonistas merecen todos los respetos, y respetos hay que presentar también a la otra pareja que actuó ayer, la formada por Maite Rozada y Ramsés Ilesies.