Patrimonio

Los administradores concursales sostienen que Diasa engordó sus existencias en casi 3,2 millones, así como su maquinaria y su plantilla, con la contratación de trabajadores que no eran necesarios, con el fin de cumplir los requisitos para el cobro de subvenciones del IDEPA y del Instituto del Carbón.

Maquinaria usada

La empresa compró a la empresa del hermano de uno de los administradores maquinaria en ocasiones de tercera mano y la valoró en su contabilidad muy por encima de su coste real.

Fallos de contabilidad

Los administradores concursales observan irregularidades «graves» en la contabilidad de la empresa, hasta el punto de incluir operaciones que nunca existieron.

Peticiones

Los administradores concursales piden que se declare concurso culpable y que se inhabilite al presidente del consejo de Diasa Manuel Adenso Iglesias, durante diez años. También, aunque por dos años, a los dos representantes de Sadim en el Consejo, Manuel Fernández Prada (que también formaba parte del de Venturo XXI) y Gregorio Rabanal Martínez, consejero delegado de la sociedad de diversificación minera. Pide además a los representantes del consejo que repongan los más de 800.000 euros de pérdidas que supuso para la empresa la compra de material obsoleto y usado.