Oviedo, Pablo GALLEGO

En los pasillos de la Junta General del Principado ya no resuenan las solicitudes del Grupo parlamentario de Foro Asturias para acotar al máximo los gastos de los políticos en el Parlamento regional. En sólo un año y siete meses, de su encendida defensa de la austeridad -cuando, en junio de 2011, todo indicaba que ellos serían el grupo llamado a sostener al nuevo Gobierno regional-, los diputados foristas han pasado ahora, como primer grupo de la oposición, a apoyar las actuales asignaciones a los grupos. A pesar de que, como critican los sindicatos, las cuentas de la Cámara para el próximo año -en lo que a asignaciones a los grupos, a los diputados y a los asesores y auxiliares se refiere- son superiores en casi 650.000 euros al Presupuesto para 2011, el último aprobado. Ese al que los diputados casquistas no querían añadir ni un euro para el funcionamiento de su grupo tras entrar en la Cámara.

Todo comenzó con bronca. El 15 de junio de 2011, en la primera sesión de la Junta de Portavoces, Foro votaba en contra de aumentar en 416.172 euros el presupuesto de la Junta para incluir la cantidad que les correspondía como nuevo grupo parlamentario. Su intención era que los 104.043 euros mensuales que recibían en total los otros tres grupos -socialista, popular e IU- se repartieran entre cuatro conforme al número de diputados. Ellos, con 16, eran los que más dinero recibirían.

Para el resto de grupos, la propuesta de Foro ocultaba el deseo de «asfixiar» a la oposición, privándola de los recursos necesarios para su labor de control al Gobierno, habida cuenta de que Foro se encaminaba hacia el Ejecutivo regional. «Cuando el Grupo Socialista estaba en mayoría siempre entendió que la oposición necesitaba medios para desarrollar con dignidad su labor política», afirmaba entonces el portavoz socialista Fernando Lastra. Al final, el incremento en el Presupuesto de la Junta se aprobó con el voto a favor del PSOE y del PP, la abstención de IU y el voto en contra de Foro, que aseguraba que lo que la oposición en realidad no quería era ver reducidas «sus asignaciones de grupo». De ahí al discurso sobre la decadencia del Principado causada por los políticos «apoltronados», permanente en la campaña electoral casquista, no mediaba ni un paso.

Con estas cifras, el Parlamento regional -entonces presidido por el popular Fernando Goñi- comenzó a elaborar su proyecto de Presupuestos para 2012. El montante total, de 14,4 millones de euros, era un 4,4 por ciento inferior al Presupuesto de 2011, e incluía los 416.172 euros que Foro rechazaba para su grupo. El casquista Pelayo Roces, entonces vicepresidente segundo de la Cámara, votó el 13 de diciembre de 2011 a favor de estas cuentas, como el resto de los miembros de la Mesa. Días más tarde, el 23 de enero y sobre el mismo documento ya aprobado por la Mesa, el portavoz de Foro José Antonio Martínez votó en contra.

El Presupuesto de la Junta para 2012 nunca llegó a aprobarse oficialmente. Las cuentas del Parlamento se incluyen en el proyecto de Presupuestos del Principado -el Ejecutivo es quien pone los fondos para el Legislativo-, y en el año que ahora termina Asturias vivió en prórroga presupuestaria, tras el rechazo del Parlamento a las cuentas diseñadas por el Gobierno de Foro. Aun así, el incremento en el Presupuesto de la Junta para costear la asignación al grupo de Foro se hizo efectivo en la prórroga, y los gastos en cuestión, que en 2011 sumaban 2,5 millones, llegaron en 2012 hasta los 2,9 millones de euros.

En marzo de este año Asturias vivió, por primera vez en su historia autonómica, un adelanto electoral. Con un nuevo equilibrio de fuerzas en la Junta -el PSOE tiene ahora 17 diputados, frente a los 12 de Foro, los 10 del PP, 5 de IU y uno de UPyD-, hubo una nueva primera reunión de la Junta de Portavoces. Esta vez, sin bronca.

La ahora portavoz de Foro, Cristina Coto, seguía insistiendo en que la Junta debía entonces «retrotraerse» al dinero que el Parlamento regional manejaba cuando sólo había tres grupos, y repartirlo entre cinco: PSOE, Foro, PP, IU y el Grupo Mixto, compuesto por el único diputado de UPyD. Eran los días en que en la Junta se sucedían las reuniones para tratar de fraguar un pacto de gobierno. Foro aún estaba al frente del Principado, y trataba de conseguir el apoyo del PP y de UPyD para seguir en él, tras el órdago del adelanto electoral. Fue la última vez en que Foro solicitó volver a los niveles de gasto de 2011 en la Junta.

Pocos días antes de anunciarse el acuerdo entre el PSOE y UPyD que alzaría al socialista Javier Fernández a la Presidencia del Principado, los portavoces de los cinco grupos acordaron que los partidos dispondrían de 1,3 millones anuales, frente a los 1,7 millones de entonces. En total, añadiendo asignaciones, recortes en los sueldos de los asesores y eliminando los vehículos oficiales, los grupos cifraban el recorte en más de 400.000 euros. El «tijeretazo» había sido propuesto por dos nuevas parlamentarias: la presidenta del PP y portavoz, Mercedes Fernández, y la diputada popular Emma Ramos.

Los populares, como Foro, también han variado con el tiempo su postura en el espinoso asunto de las asignaciones. De votar a favor del aumento en junio de 2011, los populares han pasado a ser ahora los primeros en exigir que el gasto de los grupos políticos en el Parlamento disminuya. Mientras, con el paso de los meses y tras la salida de Foro del Gobierno, la beligerancia forista contra el gasto en la Junta y los, según este partido, «apoltronados» políticos asturianos se ha ido diluyendo lentamente. El partido casquista ha ocupado en el consejo de la RTPA todos los asientos que le correspondían, mientras el PP, que exigía su reducción, rechazó estar presente en este organismo.

Para 2013, el presupuesto de la Junta será de 13,8 millones de euros. De ellos, 6,9 corresponden a los gastos en asignaciones a los diputados, retribuciones del personal eventual, y asignaciones a los grupos. El PSOE, IU y UPyD votaron a favor de estas cuentas. Foro y el PP se abstuvieron. Foro, por razones sin determinar. El PP, por considerar que podía haberse hecho un esfuerzo mayor. Son 514.525 euros menos que lo gastado en los mismos conceptos este 2012, pero 649.700 euros más de lo gastado en 2011. Esto es, precisamente, lo que denuncian los sindicatos de los empleados públicos. Al día siguiente, el PSOE, IU y UPyD negaron la subida, aceptando referirse sólo a la rebaja respecto a 2012 y defendiendo las asignaciones actuales. También las defendió Foro, olvidando sus peticiones anteriores, a pesar de que la cifra de referencia que utilizan los sindicatos, la aprobada en el Presupuesto de 2011, es a la que hace un año y siete meses, a punto de formar Gobierno, el partido casquista quería volver a toda costa, llevándose al resto de grupos con él.

Ahora es el PP, y no Foro, quien lidera las peticiones de austeridad a los parlamentarios. En su enmienda a la totalidad de los presupuestos, ya rechazada, y en las enmiendas parciales presentadas el pasado viernes, los populares solicitan que las asignaciones a los diputados, a los grupos y al pago de asesores vuelvan a los niveles de 2011. De momento, y a falta de que su propuesta se vote en el Parlamento, al PSOE y a UPyD no les ha gustado nada.