Oviedo, José Luis SALINAS
Los pequeños empresarios y profesionales liberales (médicos, abogados...) declaran a Hacienda en Asturias casi 10.000 euros menos en ingresos anuales que trabajadores asalariados y pensionistas. El Principado es, según los datos que presentó ayer el sindicato que agrupa a los técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha), una de las comunidades donde más alta es esta diferencia, tan sólo superada por Madrid, donde ésta llega a los 10.776 euros. El informe, señala la central sindical, deja en evidencia un «fraude masivo y estructural».
Según el estudio, basado en las estadísticas de la liquidación del IRPF correspondiente al ejercicio 2009 (es decir, las declaraciones presentadas en 2010), los pequeños empresarios y profesionales declaran de media en Asturias 9.778 euros. Son casi 3.000 euros menos que los ingresos propios de un trabajador «mileurista» y la mitad de lo que, por término medio, declaran los trabajadores por cuenta ajena.
Los asalariados y pensionistas que tienen que rendir cuentas con Hacienda declararon de media en Asturias unos ingresos de 19.593 euros, una cantidad muy similar al promedio del país.
La propia Agencia Tributaria anunció hace unas semanas su intención de intensificar la lucha fiscal contra el fraude aumentando la presión inspectora sobre las empresas y, de manera singular, reforzando el seguimiento de los profesionales liberados. La entidad anunció que durante este año se iba a reforzar el trabajo conjunto con la inspección de Trabajo y con la Seguridad Social y que se redoblarían las labores de rastreo del fraude en sectores distintos al inmobiliario, donde se habían centrado buena parte de los esfuerzos en los últimos años. El Gobierno aprobó también un paquete de medidas para luchar contra el fraude laboral, que entraron en vigor ayer y que, principalmente, van dirigidas a perseguir a las empresas que empleen a personal de forma irregular.
Las cifras a nivel nacional muestran también una notable desigualdad entre lo que declaran los trabajadores y pensionistas con los pequeños empresarios, muy similares a las asturianas. La diferencia alcanza los 8.323 euros.
Según el sindicato de técnicos de Hacienda, desde 1993 esta brecha se ha ido incrementando «año tras año hasta alcanzar su mayor diferencial en este último ejercicio, debido a la existencia de un fraude fiscal estructural y masivo entre los autónomos que tributan de media el IRPF por debajo del mileurismo». El secretario general de Gestha, José María Mollinedo, apuntó que «no es creíble que durante los últimos 16 años, década de expansión incluida, un empleado o pensionista gane de media más que un pequeño empresario, notario, arquitecto, médico o abogado. De ser esta la realidad, ¿quién quiere emprender un negocio para aspirar a ser mileurista?».
Según el sindicato la lucha contra el fraude fiscal va por el camino equivocado y en lugar de aumentar la presión sobre autónomos recomiendan actuar sobre «las bolsas de fraude de las grandes fortunas y empresas de gran tamaño, principales responsables de la evasión fiscal en España».
Las principales asociaciones de autónomos cargaron contra el informe de los técnicos de Hacienda. La federación ATA tildó de «irresponsables» los cálculos del sindicato y la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA) aseguró que las declaraciones medias de los autónomos se redujeron por la crisis.
