Tal como todo hacía prever, el proceso de integración del Hospital del Oriente de Asturias en la red pública sanitaria -hasta ahora éste era un centro concertado, pero no integrado en la red del Sespa- ha provocado reacción en el resto de centros que igualmente desarrollan sus servicios para la sanidad pública, pero cuya gestión depende de entidades privadas.

La Plataforma de Centros Sanitarios Concertados de Asturias, constituida en mayo de 2008 e integrada por los hospitales de Jove, Cruz Roja de Gijón, Avilés, Sanatorio Adaro y el Centro Comunitario de Sangre y Tejidos de Asturias, ha mostrado su malestar con el Sespa por el hecho de estar siendo «ninguneados». Portavoces de la plataforma aseguran que su intención es la de insistir ante las autoridades regionales para alcanzar el objetivo general de «conseguir un convenio colectivo único para todos estos centros, y para implantar en los mismos un reglamento de contrataciones que garantice el acceso al empleo en igualdad de condiciones». Para los portavoces de los trabajadores de estos cinco centros sanitarios, «la integración del Hospital de Arriondas en la red pública supone un paso muy importante en nuestro objetivo final, que es la consecución de un sistema sanitario único público con los mismos derechos para todos los usuarios y trabajadores».