Leonardo Crespo, de 2 años y residente en el barrio ovetense de Vallobín, se despertó ayer con vómitos y diarrea. Su madre, Viky López, ecuatoriana, decidió llevarle al médico. "Fuimos al viejo hospital y nos dijeron que viniéramos al nuevo, porque ellos ya cerraban", explicó la mujer, quien llegó al nuevo HUCA a las ocho y doce minutos.

Ya en la sala de espera, aguardando a que le dieran los correspondientes informes, Viky López señaló que "vi a todo el personal un poco perdido". "Me dijeron que es un nuevo sistema de trabajo con la informática y los demás aparatos", agregó. La mujer destacó que "todo el mundo nos trató muy bien". "Exploraron al niño, le tomaron la temperatura y le pusieron sueros para que dejara de vomitar", relató.

Dentro del ámbito tecnológico del nuevo HUCA, ayer se producía el debut de "Manolín", el robot encargado de transportar los carros de comida, medicamentos, lencería y material de almacén entre las nueve plantas que integran el edificio de hospitalización del recinto de La Cadellada. La plataforma robotizada inició su andadura con la comida del mediodía, en la que el arroz era el menú principal. El nuevo Hospital está dotado de una docena de "manolinos", nombre con el que lo han bautizado los operarios del centro sanitario. Aunque no es único en España, sí será el primero que trabaje las 24 horas del día.