Mercedes Fernández, presidenta del PP, que se desplazó a Tazones y a Luanco, pidió "apoyo" para las personas afectadas y planteó la opción de arbitrar ayudas extraordinarias "para abordar la emergencia y paliar los daños causados por los azotes del mar". "Los dineros públicos han de servir para ayudar a la gente", señaló. En este contexto, Izquierda Unida (IU) pidió a través del diputado Gaspar Llamazares que el área asturiana afectada por el temporal (además de la gallega, la cántabra y la vasca) sea declarada zona catastrófica. Manuel González Orviz, coordinador general de IU, pidió "colaboración entre las administraciones para dar respuesta a los daños del temporal". Dentro de la misma formación, el portavoz parlamentario, Ángel González, sugirió la posibilidad de incluir en el crédito extraordinario de la prórroga a los Presupuestos las partidas económicas pertinentes a fin de atender las ayudas necesarias para hacer frente a los desperfectos.
El representante en Asturias de Unión Progreso y Democracia (UPyD), Ignacio Prendes, pidió aplazar la búsqueda de responsabilidades. "Es el momento de atender las emergencias y tomar medidas, porque hay gente que ha perdido su medio de vida ligado al mar", dijo. "Vivimos en el Cantábrico, que es un mar distinto, con sus ventajas y sus inconvenientes". Por su parte, el líder de Foro, Francisco Álvarez-Cascos, se desplazó a Luarca y a Cudillero, e instó al Principado a hacer frente "con urgencia" a los daños. "Es razonable que se abra una vía de ayudas desde la Administración para facilitar la recuperación", aseguró. Los servicios de emergencias del Principado recomiendan a la ciudadanía evitar exponerse a las fuertes rachas si no es necesario, así como prestar atención ante el peligro de desprendimiento.
